24/02/09 0:00
Fernando Fernández
La trascendencia de Miquel Julià (Palma, 1988) en el panorama automovilístico internacional empieza a traspasar fronteras jamás imaginadas para este deporte en el archipiélago. Con el International GT Open -fue tercero en 2008- en el bolsillo y Roger Racing (equipo oficial Ferrari) rendido a sus encantos al volante, el joven piloto mallorquín se ha convertido en una pieza codiciada dentro del mercado de las cuatro ruedas. Tanto, que una de las fórmulas de competición más reputadas del planeta se ha fijado en las prestaciones que ofrece el otrora ganador de las World Series de Karting, que tiene sobre la mesa dos ofertas de entidad que pueden variar de forma notable su destino personal y profesional. Las Le Mans Series, competición centrada en vehículos de resistencia, han puesto su punto de mira en el balear, que podría dar el salto al otro lado del Atlántico si finalmente es convencido y consigue reunir los requisitos solicitados a uno de los jóvenes pilotos más solicitados en todo el viejo continente.
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