Enric Mas, durante la pasada edición de La Vuelta. | Sport Cycling Agency

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A la espera que formalizarse una renovación que es un secreto a voces -acaba contrato en 2025-, Enric Mas ya disfruta de sus vacaciones tras cerrar la que ha sido su mejor -y más regular- temporada. Otro curso en el que la cuenta pendiente ha sido la victoria que ha buscado y que se le ha resistido en escenarios como La Vuelta, donde regresó al podio por cuarta ocasión para ser tercero y en un par de ocasiones fue segundo en sendas etapas.

El cambio de 'chip', la mentalidad más ambiciosa y ganadora del ciclista de Artà, que cierra su quinta campaña en las filas del Movistar Team en el puesto 17 del ránking de la UCI, después de 74 días de competición y 11.382 kilómetros rodados como jefe de filas de la estructura telefónica, en la que ha reafirmado sus galones a base de constancia y regularidad.

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Su tercer puesto en la general de La Vuelta ha servido de reivindicación, sin dejar de lado su espectacular octava posición en el Campeonato del Mundo de fondo en carretera de Zúrich, donde peleó por el bronce hasta el esprint final. En pruebas de un día también volvió a mostrar su idilio con las clásicas italianas, siendo quinto en Lombardía -fue segundo en 2022- además de estar delante en el Giro dell'Emilia, suspendido por la fuerte lluvia cuando estaba escapado.

En vueltas de una semana, Enric Mas ha mostrado buenas prestaciones. Su quinto puesto en Catalunya, el sexto en Romandía y el séptimo en Suiza dejan patente su regularidad y el motor diesel que le define. El lunar llegó en el Tour de Francia, donde una mala primera semana enterró sus opciones para acabar en el puesto 19 de la general tras una espectacular progresión final que le llevó a pelear por victorias de etapa.

Pese a sus buenos resultados en 2020 (quinto en Tour y Vuelta) y 2021 (sexto en Tour y segundo en La Vuelta), su rendimiento global a lo largo de 2024 hace que pueda ser considerada como su mejor campaña, con esa cuenta pendiente con las victorias que arrastra desde el Giro dell'Emilia de 2022, en una 'grande' desde La Vuelta de 2018 y en pruebas de una semana llevándonos a echar la vista atrás al Tour de Guangxi de 2019, su última aparición con el Quick Step.