El colombiano Daniel Luna, durante un partido de Copa del Rey contra el Valle de Egüés. | J.P. Urdiroz

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El ascensor que conduce a la primera plantilla del Real Mallorca sigue parado. En una primera mitad de la temporada marcada por las lesiones, que han llegado a condicionar el rumbo del equipo según ha admitido el propio Javier Aguirre, el entrenador mexicano ha recurrido en numerosas ocasiones a la factoría de Son Bibiloni para completar sus convocatorias y tener un banquillo del que poder elegir. Sin embargo, ningún joven del filial ha llegado a estrenarse todavía en el campeonato regular en lo que va de ejercicio y tendrá que seguir a la espera de una oportunidad en la elite.

Aguirre y su cuerpo técnico no pierden de vista lo que sucede en el filial y en los escalones inmediatamente inferiores, aunque el reciente descenso a Tercera RFEF dificulta mucho el salto. Con dos fichas libres en la plantilla y la enfermería casi siempre ocupada por algún jugador, al cuerpo técnico bermellón no le ha quedado más remedio que echar mano de los jóvenes para asegurar, como mínimo, el fondo de armario durante alguna jornada. Y en total, desde que comenzó la campaña Aguirre ya ha convocado a ocho canteranos distintos procedentes de todas las líneas.

La representación de las categorías inferiores en el banquillo bermellón ha salpicado incluso a la portería, ya que Pere Joan García fue citado en las tres primeras jornadas (Las Palmas, Villarreal y Granada) antes de marcharse cedido al Sestao de Primera RFEF y de que llegara el Pichu Cuéllar para cerrar el candado junto a Rajkovic y Dominik Greif.

En defensa, seguramente la línea más castigada del campo por las lesiones, Aguirre ha tenido en la recámara a David López, convocado hasta nueve veces (Celta, Girona, Barcelona, Rayo, Valencia, Real Sociedad, Atlético, Almería y Osasuna) por si seguía abriéndose el agujero en la parte central. Para taponar los carriles las alternativas han sido Miguelito (Rayo y Valencia), Yuzún Ley (Real Sociedad) y Marcos Fernández (Almería y Osasuna).

En el centro del campo uno de los futbolistas de la base que más atraen a Javier Aguirre es Rubén Quintanilla, que aunque esta temporada no ha participado en ningún partido de LaLiga fue citado en las siete primeras jornadas y en el último encuentro del año frente a Osasuna. El catalán, recientemente renovado, es uno de los privilegiados de la tropa, ya que el pasado mes de mayo tuvo la fortuna de tomar la alternativa en Primera División al disputar los últimos minutos de la visita al Camp Nou.

En ataque hay otros dos jóvenes esperando su momento sobre la plataforma de lanzamiento. Uno es el colombiano Daniel Luna, que en estos meses ha estado hasta en una decena de ocasiones en el banquillo. Es el otro es el mallorquín Pau Mascaró, que fue incluido en el grupo para el encuentro en Son Moix contra el Alavés.

La temporada pasada la lista de canteranos que asomaron la cabeza también fue larga y por ella ya pasaron otros jugadores como Lluís Montiel o Benja Garay.

El apunte

La Copa del Rey, un oasis para los jóvenes

El nutrido grupo de jóvenes que intenta abrirse paso en la primera plantilla del Mallorca sí que ha tenido alguna oportunidad para darse a conocer en las primeras rondas de la Copa del Rey gracias a las eliminatorias frente a los modestos Boiro y Valle de Egüés. Es el caso de Quintanilla y del colombiano Daniel Luna, que incluso han sido titulares en las confrontaciones de primera y segunda ronda, o de David López y Pau Mascaró, que han acumulado sus primeros minutos de rodaje entrando al campo desde el banquillo. En el último encuentro también entró en la lista Carles Sogorb, aunque no llegó a disponer de minutos.