La tarde, que había empezado tranquila, desembocaba en un carrusel de emociones. En un viaje por una montaña rusa. Son Moix se preparaba para bajar la persiana hasta agosto y para ponerle el candado en Palma a la era Javier Aguirre, pero lo primero era lo primero. El Mallorca llegaba sin acabar la faena y el riesgo de un descenso tenía a parte de la hinchada paralizada.
Tras el recibimiento al bus del equipo y los protocolos habituales en estos encuentros, al que se sumaban los homenajes al Palma Futsal por su segunda Champions, el mallorquinismo se vino arriba. Parecía que el dolor de estómago le iba durar media hora que fue lo que tardó en marcar Larin y en premiar la buena presentación bermellona. El miedo que le había entrado en el cuerpo mientras el Cádiz le ganaba al Sevilla de aquella manera, empezaba a salir poco a poco tras el gol del canadiense, de nuevo titular. En ese momento todo parecía guionizado al estilo de una película americana en la que todo son risas. Ni un solo susto. Ni una sola alteración del pulso cardíaco. Ni una gota de sudor frío. La permanencia, a la vista de todos, estaba junto al escudo.
La burbuja se pinchó antes del descanso. Los transistores, ahora con forma de teléfono, aplacaban la felicidad de la grada y el banquillo al anunciar un gol de Javi Hernández a los 38 minutos. Quedó en un susto porque el VAR no aprobó la validez del tanto, pero la sospecha de que algo malo podía ocurrir había regresado con fuerza. Sobre todo después de que Sergio Arribas marcara para el Almería y dejara en nada el trabajo hecho hasta ese momento. Llegó el descanso para cortar los primeros escalofríos y soltar un poco los músculos.
La segunda parte fue otra cosa. El Mallorca atacaba y se enredaba una y otra vez en sus traumas ofensivos. Mientras la grada abroncaba a Luka Romero, que regresaba por primera vez a la que había sido su casa y plataforma de lanzamiento, el reloj iba pasando y la falta de goles del Cádiz mantenía frío el ambiente. Hasta que la temperatura se disparó de repente. El Almería se ponía por delante con un impresionante gol de Bruno Langa y Son Moix se quedaba mudo. Soplidos, murmullos y miradas de desconfianza. Y miedo, claro.
En mitad de la desesperación de la grada, el Mallorca encontró una puerta abierta en la pobre defensa del Almería. Darder facturó el empate —el último partido en Son Moix lo salvaron los dos fichajes más caros y llamativos del verano anterior— y el mallorquinismo volvió a creer en que llegaría a tierra por sus propios medios, aunque eso habría roto el espíritu de la temporada. De Burgos Bengoechea pitó el final y el estadio volvió a encoger la respiración. El volcán paró de echar lava cuando acabó el partido de Cádiz y el Mallorca quedaba a salvo. Era el momento de los fuegos artificiales. Más por alivio que por otra cosa. Pero al menos el Mallorca seguía siendo de Primera División.
6 comentarios
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CocodrilePues ha llegado eliminando al Girona y a la Real Sociedad ¡Los que no saben como ha sido son los vascos y catalanes!. ¿Sabes cuantas veces chutó el Mallorca entre los tres palos el pasado domingo ¡¡8 veces!! y tiros a puerta 29 ¿Acaso quieres que Aguirre también los meta? Te recuerdo que Muriqui, el goleador del Mallorca ha estado de baja casi tres meses y para coger ritmo un mes más y Larín no ha respondido con las espectativas que vino. Dirás como dicen muchos que Muriqui no es un killer ¿Lo era Eto'o? seguro que todos dicen que si ¡Y lo era! pues metió 54 goles con el Mallorca en 5 temporadas y Muriqui lleva 27 en solo 2. Haz las cuentas. Con más acierto, el Mallorca habría estado entre los 10 primeros sin duda, pero la temporada que viene que siga Aguirre y estará más conjuntado el equipo, que hubo muchas bajas y muchas incorporaciones y eso se tiene que currar para que rule. ¡¡AMUNT MALLORQUETA!!
¡¡Que siga Aguirre!! entre otras porque funciona con el Mallorca y los recambios de entrenador ya sabemos como funcionan, culpables directos de que el Mallorca bajara a Segunda División y después a Segunda B. Ha sido una mala temporada, porque no le han funcionado algunos jugadores nuevos como Larín, pero en la temporada que viene con tanto traspaso la anterior, el equipo sin duda mejorará, solamente nos falta que entre el balón porque llegar ha llegado y de sobra como para quedar entre los 10 primeros ¡Y goles son amores! Vender a Larín, esperar que Muriqui no se lesione como este año y dar más presencia a n'es Dimoni y algún refuerzo en el centro del campo. A los que dicen que Darder es top los mismos en media temporada le llamaban patata ¡Así son los listos que critican al Mallorqueta. Después con el mismo equipo con algun refuerzo la temporada que viene lo borda ¡Y responden "YA LO DECÍA YO"! es lo que hay ¡¡AMUNT MALLORQUETA!!
Han tenido que pasar 37 jornada para que Aguirre se diera cuenta de que Darder es jugador Top. Con más compañeros delante jugaría mejor
No nos tenemos que engañar que la plantilla de este año ha sido de las peores de estos últimos años. No creo que toda la culpa sea de Aguirre que su cuota de responsabilidad tendrá. Los grandes fichajes de verano con excelentes números el año pasado han sido un fiasco para este. Pero si nos fijamos bien este Mallorca no ha propuesto nada de juego durante toda la campaña. Algún arreón ha tenido, como el llegar no sabemos como a la final de la copa del Rey. Durante toda la liga hemos visto un juego que denotaba la falta de creación de jugadas, siempre pases hacia atrás y lentos. Parecían que no sabían que hacer con el balón y se pasaban el balón (el marrón) de unos a otros y unos centros que madre mía que malos. Así difícilmente se puede no dar espectáculo si no marcar un gol.
Creo que la plantilla era buena, pero el Señor Aguirre no le ha sabido sacar partido en la liga y eso le ha costado el puesto.
Acabada la temporada ha quedado claro que Aguirre no ha podido hacer mucho mas con este equipo que no da para mas y los fichajes que se hicieron la temporada pasada han resultado un error, por eso la temporada ha sido pésima, de cara a la próxima deberán andar mas finos en cómo se gastan el dinero.