El año 2023 ha puesto de manifiesto una serie de necesidades que desde el sector del rent a car venimos reclamando desde hace tiempo pero que ahora se han hecho más evidentes. Entre estas cuestiones hay una de vital importancia como es la inadecuación de la legislación ambiental actual, en particular la Ley de Cambio Climático 10/2019, a las necesidades reales de descarbonización de nuestra flota de vehículos de alquiler.
Es indiscutible que la descarbonización es un objetivo prioritario en la lucha contra el cambio climático. Sin embargo, la electrificación completa de la flota no puede ser vista como la única solución viable. esde la Asociación Balear de Empresas de Alquiler de Vehículos (Baleval), defendemos fervientemente la innovación y la adopción de nuevas tecnologías respetuosas con el medio ambiente. La antigüedad media de la flota de nuestros asociados no supera los 2 años mientras que la antigüedad del parque en manos de propietarios particulares de vehículos es de 15 años. Nuestros parques son 7 veces más jóvenes que el parque en propiedad y por lo tanto infinitamente más respetuoso con el medio ambiente.
También está demostrado que un vehículo en propiedad, en manos de un particular, permanece estacionado aproximadamente el 96% del tiempo. Por otro lado, el sector del rent a car se dedica a la movilidad compartida, optimizando sus operaciones de manera eficiente para que un solo vehículo pueda atender la movilidad de decenas de personas y familias, tanto residentes como turistas.
Siguiendo con la optimización y eficiencia en materia de economía circular, cabe recordar que una parte significativa de la flota de vehículos en alquiler acaba siendo comprada por particulares residentes dando así una segunda vida a dicha flota.
En cuanto a los vehículos eléctricos, es importante destacar que, como he venido expresando durante años, y como ha señalado recientemente Carlos Tavares, CEO de Stellantis, uno de los principales fabricantes a nivel mundial, la fabricación de una batería para coches eléctricos requiere el uso de 500 kilogramos de materias primas, y esto no es sostenible. Además, la movilidad eléctrica es un 40% más cara que la convencional, y llevará tiempo hasta que los vehículos eléctricos alcancen precios accesibles para la clase media.
Es crucial destacar que el sector de las empresas de alquiler de vehículos en Balears estamos comprometidos con la sostenibilidad y deseamos contribuir al bienestar de los residentes y a la preservación de nuestras islas y de su territorio privilegiado. Sin embargo, para lograr resultados realistas y efectivos, es necesario un mayor grado de coherencia en la transición hacia prácticas más sostenibles. Entendemos también que circular con vehículos eléctricos en territorios dónde la carga eléctrica no proviene de energías limpias padece de coherencia medioambiental. Para una transición energética eficiente, aumentar la capacidad de energías limpias en Balears debe ser una prioridad.
Una vez este importante hito se haya conseguido, otro desafío importante al que nos enfrentamos es la falta de infraestructura adecuada para la recarga de vehículos eléctricos. Aunque la misma normativa antes mencionada exige a las empresas disponer de un porcentaje de su flota total de vehículos eléctricos, esta medida carece de respaldo al no contar con la infraestructura necesaria para garantizar su funcionamiento. Es esencial reconocer que la mayoría de nuestros usuarios, ya sean residentes o turistas, no desean preocuparse por la disponibilidad de cargadores eléctricos ya sea en su día a día, como durante su tiempo de descanso.
Otro punto crucial que merece atención es la falta de apoyo financiero para el sector del rent a car en comparación con otros sectores del transporte terrestre. Si bien reconocemos la importancia de la adaptación a los avances tecnológicos y la digitalización, es fundamental que nuestras empresas reciban el mismo nivel de apoyo que otros sectores en la forma de subvenciones y ayudas.
Urge una revisión de estas políticas para garantizar una competencia justa y equitativa en el mercado. Para empezar, si resulta que las empresas de rent a car son las únicas en tener la obligación de comprar e invertir en vehículos eléctricos, no es de recibo que las ayudas que recibimos por unidad sean inferiores a las que pueda tener un particular por la compra de una sola unidad
Finalmente, no podemos pasar por alto la presencia de empresas clandestinas que operan en las Islas Balears fuera de la ley como empresas de alquiler de vehículos. Este intrusismo no solo amenaza la integridad y sostenibilidad de las empresas legítimas del sector, sino que también plantea serias preocupaciones en términos de seguridad pública y protección al consumidor. Es fundamental que las autoridades tomen medidas efectivas para combatir el intrusismo y proteger tanto a los consumidores como a las empresas legítimas del sector. Solo mediante una acción coordinada y enérgica podemos garantizar un entorno de negocios justo y seguro para todos los involucrados.
Por todo ello, desde Baleval invitamos a las autoridades competentes a reflexionar conjuntamente para abordar las cuestiones planteadas y trabajar en estrecha colaboración para desarrollar soluciones efectivas y equitativas. Solo así podremos avanzar hacia un futuro de movilidad más sostenible y justo para todos.l