Quizás uno de los más visitados es el belén de Cort, que hace poco se ha renovado y en su pesebre se incluyen reconocibles edificios de Palma. El Consell de Mallorca también cuenta con su propio pesebre en la entrada de su edificio.
Asimismo, dos asociaciones son las encargadas de levantar estas impresionantes maquetas, que les lleva meses de trabajo. La Associació de Betlemistes de Mallorca a Palma se encarga de varios pesebres. Entre ellos, el Betlem Mallorquí del Centre Cultural la Misericòrdia. El belén del Banco Santander (Alexandre Rosselló, 11) y el del Mercat de Santa Catalina (Plaça de la Navegació, s/n) merecen otra visita por la espectacularidad de sus figuras y paisajes.
En los barrios, la Associació de Betlemistes también es responsable del pesebre de la Església de Sant Antoni Abat, en Son Ferriol, así como del de la Església de Sant Roc, en Son Roca. El mercado de Santa Catalina merece también otra visita.
Los oficios más antiguos, los pageses y la tradición religiosa se mezclan en los montajes de la Agrupació de Betlemistes Francesc Rosselló. El nacimiento de El Corte Inglés de Anvingudes y de C&A aúnan la visita más tradicional con las compras navideñas.
En el centro de Palma también merece la pena visitar el belén del Centre d'Història i Cultura Militar de Balears (Sant Miquel, 69), así como el del Centre de Cultura Sa Nostra (Concepció, 12).
En las barriadas, destacan los pesebres de la parroquia de la Sagrada Família (Son Alemany, 6. Son Oliva), así como el de la iglesia de Santa Catalina Thomàs (Plaça Santa Pagesa). La parroquia de Crist Rei (Baltasar Valentí, 32-A, el Viver) tampoco falta a esta cita navideña.
El belén de Muebles Casas merece una visita a Es Molinar y lo mismo ocurre con los nacimientos del hospital Sant Joan de Déu o el del Centro Gallego, en Can Pastilla.