En el caso de s’Illot hay que destacar la presencia del poblado talayótico, que recientemente ha pasado a ser de titularidad municipal, donde, después de 37 años, se han vuelto a realizar excavaciones durante este verano.
Se trata de un espacio muy cercano a la playa y que está previsto que sea un punto de interés importante en el recorrido del carril bici, además de suponer un elemento de que aporte visitas de carácter cultural a la zona.
Por su parte, la playa de sa Coma es una arenal que discurre entre sa Punta de n’Amer y la zona rocosa de s’Illot. En sus 800 metros de longitud destaca por tener una agua azul, grano fino y blanco así como bancos de posidonia.
Lo más destacado de esta zona es sa Punta de n’Amer, una península de 200 hectáreas declarada ANEI y que separa las playas de sa Coma y Cala Millor. En su interior se encuentran algunas edificaciones y restos de interés como Es Castell, el Talaiot des Tancat de sa Torre, las antiguas canteras de marés o búnkers.
La playa de sa Coma dispone de alquiler de hamacas, duchas, aparcamientos, baños públicos, pasarela para discapacitados,...