El escritor Bernardo Atxaga será coordinador de Cultura de 'Sumar'

Se trata de 35 perfiles académicos y técnicos que encabezarán los equipos, con vocación de análisis y debate y centrados en multitud de áreas --desde economía y vivienda hasta feminismo y juventud--, que trabajarán con la vista puesta en presentar en febrero los resultados de este «trabajo colectivo».

A Salinas y Sánchez Cuenca, al frente de los equipos de Justicia y Calidad Democrática, respectivamente, se suman el escritor Bernardo Atxaga, que se encargará de Cultura; el investigador en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y profesor de Sociología en la Universidad Complutense de Madrid César Rendueles y Menéndez de Llano, al frente de Bienestar y Derechos Sociales; y Yayo Herrero López, profesora de la UNED e investigadora ecofeminista y ecosocialista.

Del ámbito político, destacan Agustín Moreno, diputado de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid --fichado por Pablo Iglesias para las elecciones de Madrid de 2021-- y al frente de Educación; y la concejala en Santiago de Compostela Marta Lois, profesora de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Santiago, que se encargará del área de Cuidados.

Desde que avanzara la creación de Sumar, que ahora está inmersa en el proceso de escucha con sectores de la sociedad civil, la también titular de la cartera de Trabajo ha apuntado que la plataforma tendrá mucho que decir, con sus propuestas, en materia de fiscalidad, energía, economía, la lucha contra el cambio climático y transición ecológica justa, entre otras materias.

Un nuevo país, pero "no a trompicones"

Díaz, que se ha mostrado «orgullosa» de los coordinadores sectoriales y les ha agradecido su compromiso, ha reivindicado la necesidad de crear un país «mejor», pero hacerlo de una forma calmada, «no a trompicones, a saltos».

«No va de relatos ni de correr», ha agregado durante la presentación de los coordinadores de los equipos en Madrid, antes de abogar por «tejer un movimiento ciudadano y pensar en cada una de las tareas pendientes».

De esta forma, ha matizado que la idea es formular un proyecto de país en un tiempo estimado de una década y ha sostenido que la mirada ha de ser «larga y profunda». En este contexto, ha advertido de que «el futuro no se acomoda a los tiempos electorales». Por el contrario, ha indicado que 'Sumar' no quiere «restringir la imaginación al tamaño de una urna o una lista electoral».

«Necesitamos diez años y o lo hacemos ahora o no será posible», ha apuntado, destacando también la metodología elegida, la que más «le gusta»: «el diálogo, escuchar de verdad» y, si es necesario, «confrontar porque no pasa nada».

A juicio de la vicepresidenta segunda, el proyecto ha de terminar con un nuevo contrato democrático y social que sea «verde, feminista, que tenga a los jóvenes dentro, que sea intergeneracional».