Durante su comparecencia como acusado, Sánchez Rull ha manifestado que la construcción de dicho complejo fue licitada por segunda vez por el Ayuntamiento de Algeciras tras el «fracaso» de la primera contratación a cuenta de la situación de la empresa encargada; explicando que concurrieron al procedimiento las empresas Supera, Campusport y Body Factory Gestión, adjudicataria esta última del proyecto.
Entonces, según ha dicho, él «en absoluto» conocía que hubiese alguna «relación» entre Body Factory Gestión y Fitonovo, sobre todo porque la primera figuraba con su nombre en las plicas del concurso público y «no como una unión temporal de empresas».
La mesa de contratación
El entonces edil de Urbanismo de Algeciras ha manifestado que él participó en la mesa de contratación constituida para este concurso público, junto con otros «cargos» políticos, incluso de la oposición, y funcionarios del Ayuntamiento.
La mesa de contratación, según ha defendido, se limitó a «recoger escrupulosamente la puntuación técnica de los informes» técnicos elaborados por los funcionarios municipales sobre las ofertas, sin «ninguna aportación verbal» de los miembros de dicho órgano, negando así los cargos atribuidos en su contra.
Los "mismos pliegos"
Tras la correspondiente «valoración» en el seno de la mesa de contratación, la adjudicación fue elevada al pleno del Ayuntamiento de Algeciras, siendo aprobada cuando él ostentaba el puesto de edil de Urbanismo, destacando que los pliegos de condiciones de este concurso público fueron «los mismos» que en la licitación anterior, es decir que los pliegos eran «calcados» en ambos procedimientos".
También ha prestado declaración como investigado Carlos de Lecea Machado, delegado de Fitonovo en Madrid entre 2010 y 2013, quien ha negado cualquier «relación» con la adjudicación de Algeciras.
Lo «único» que hizo, según ha dicho, es que aprovechando que viajaba de Madrid a Sevilla dentro de sus funciones, «a petición» del jefe de Fitonovo, José Antonio González Baró, transportó «dos cantidades de dinero» contenidas «en un sobre» que entregó en la capital andaluza al adjunto a la dirección de Fitonovo Ángel Manuel Macedo Gajete.
Asegurando que desconocía de cuánta cantidad de dinero se trataba, ha explicado que era un «traslado de dinero entre dos socios de la UTE» que conformaban Body Factory y Fitonovo y que actuaba «siguiendo instrucciones» de González Baró. Tampoco supo, según ha asegurado, la «finalidad» del dinero.
lo
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.