Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, la operación comenzó en el mes de agosto, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de un posible punto de venta de drogas al menudeo en una vivienda de la pedanía de Cogullada, perteneciente a Carcaixent.
Fruto de las investigaciones llevadas a cabo por los agentes, lograron averiguar que en dicha vivienda se estaba vendiendo diferentes tipos de sustancias prohibidas como cocaína, hachís y marihuana.
Además, se pudo constatar por parte de los agentes que el método utilizado por los compradores era siempre el mismo. Los compradores aparcaban el vehículo a escasos metros del domicilio e, incluso, en ocasiones, en la misma puerta con el motor encendido. Después, llamaban al timbre de la vivienda o por teléfono y, al poco tiempo, las personas moradoras bajaban y realizaban la transacción que duraba escasos segundos.
Asimismo, se verificó que en dicho punto se estaba intercambiando droga por la entrega de efectos robados por parte de los compradores como forma de pago.
Finalmente, los investigadores realizaron un registro en la vivienda y hallaron 30 gramos de cocaína, 100 gramos de hachís y 500 gramos de marihuana, todo ello listo para su distribución, además de 741 euros en efectivo, junto con el material necesario para su envasado y pesaje. La vivienda poseía una habitación, la cual estaba preparada para el cultivo intensivo de marihuana con todos los útiles necesarios.
Además, la vivienda presentaba un enganche ilegal a la red. Los agentes intervinieron también una ballesta dispuesta para su funcionamiento con sus respectivas flechas, de la cual carecían de licencia de armas para su tenencia; y numerosa maquinaria agrícola --desbrozadoras, motosierras, bombas de agua, grupo electrógeno-- y herramientas --taladros, lijadoras--, todo ello valorado en 4.000 euros aproximadamente.
La operación culminó con la detención de un hombre de 27 años y de una mujer de 38, ambos de nacionalidad española, por un delito contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, defraudación de fluido eléctrico y receptación, dando como desarticulado el punto de venta.
Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Alzira.
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