La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ha afeado al Ministerio su tardanza en reunirse con los Letrados de la Administración de Justicia en huelga y ha aseverado: «No puede ser la respuesta el menosprecio, el insulto o la actuación prepotente».
Así se ha manifestado Bravo en referencia a las palabras del secretario de Estado de Justicia, Tontxu Rodríguez, que aseveró que la huelga era «política», «sin finalidad profesional alguna» y «que quiere perjudicar a los ciudadanos».
Bravo ha asegurado que la situación «es muy grave» ya que se han suspendido más de 120.000 juicios en España (entre 10 y 15.000 en la Comunitat Valenciana) y ha incidido en que es «absolutamente necesario sentarse, dialogar y escuchar».
A la consellera le resulta «absolutamente paradójico» que el ministerio haya tardado «casi un mes» en sentarse con el colectivo, pese a que la protesta está afectando a un «servicio público esencial», y ha explicado que ella les recibió hace 15 días pese a no tener competencia.
«Al final, los perjudicados son los usuarios», ha señalado, por lo que le ha instado a «sentarse a escuchar y dialogar con ellos». Por ello, ha considerado «esencial» escuchar a todo el mundo y luego ya ver «qué es razonable», pero «como mínimo, hay que sentarse».
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