Según fuentes tanto de la investigación, los agentes comprobaron el pasado fin de semana que esta sala permanecía abierta y ejercía su actividad a pesar de contar una orden de cese por «aforo de riesgo».
Ante esta situación, el lugar ha quedado precintado y deberá permanecer cerrado durante un año, hasta el próximo 28 de febrero 2024, según las mismas fuentes, que apuntan que tras lo ocurrido, se extremará la vigilancia para garantizar el cumplimiento de esta clausura.
Fuentes del área de Desarrollo Urbano confirmaron también la clausura de este establecimiento después de que 'El Periódico de España' avanzara la noticia del cierre.
La sala, que alberga la fiesta LGTBI 'YASS' los sábados, tiene expedientes abiertos desde 2018 por exceso de aforo, «con riesgo para la seguridad de las personas, y uno por impedir la actuación de los agentes de la autoridad».
Se le han impuesto varias sanciones. Dos de 60.001 euros, otra de 82.801 euros y otra de 80.400 euros. Este precinto deriva de un expediente de 2019 que habían recurrido y se decretaron medidas cautelares.
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