El nuevo presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Joan Calabuig, ha tomado posesión de su cargo este martes con un discurso en el que ha puesto el foco en la transición energética del Puerto de València y su sostenibilidad, bajo la premisa de que «hay muchos más espacios de acuerdo de lo que en ocasiones parece» y «nadie tiene toda la razón pero todos tienen algo de razón».
«La sostenibilidad es esencial, no es la época del desarrollismo, se trata de nuestra propia supervivencia», ha asegurado Calabuig en el acto celebrado este martes en el Edificio del Reloj, en el que han participado el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena.
La toma de posesión ha contado con la presencia de, entre otros, la delegada del Gobierno, Pilar Bernabñe; la consellera de Política Territorial, Rebeca Torró; el conseller de Hacienda, Arcadi España; el presidente de Les Corts, Enric Morera, y los alcaldes de València, Gandia y Sagunt, así como del ya expresidente de la APV, Aurelio Martínez.
Calabuig ha dedicado sus primeras palabras como presidente de la APV a agradecer el «gran trabajo» de su antedecesor «en tiempos de complejidad y enormes desafíos». Calabuig ha asegurado que él aplicará «todos sus esfuerzos y capacidades para estar a la altura» de quienes le precedieron.
En su intervención, se ha referido a la dimensión económica, ambiental y social e institucional que «señalan el camino» de la APV. En el ámbito ambiental, ha incidido en la vulnerabilidad de la costa y ha reconocido que «los puertos han generado un efecto barrera en muchos lugares», por lo que es «imprescindible escuchar a los afectados».
«Ha habido y siempre habrá muchos espacios para el acuerdo, sin maximalismos, desde la convicción de que nadie tiene toda la razón y todos tienen algo de razón», ha dicho, antes de afirmar que «la sostenibilidad es esencial» y «no es la época del desarrollismo», sino de cumplir los objetivos de desarrollo sostenible para 2030 de cero emisiones y lograr un «puerto ultraconectado, verde e innovador». «Proyección comercial y compromiso medioambiental no son desligables», ha añadido.
En el plano económico, ha destacado que los puertos de Gandia, Sagunt y especialmente València son un «factor clave para la competitividad» de las empresas en un momento en el que «el 90% del crecimiento económico mundial se va a producir en esta década fuera de Europa». Así, ha destacado las cerca de mil conexiones del Puerto de València con todo el mundo y las 35 navieras que operan en él.
También ha señalado que el Puerto deberá dar una «respuesta ágil, sólida y eficiente» ante las nuevas inversiones en la Comunitat, entre las que ha destacado la gigafactoría de celdas de baterías de PowerCo, (Grupo Volkswagen) y la electrificación de Ford.
Desde la perspectiva social e institucional, ha remarcado que «los puertos son de todos los ciudadanos y deben estar a favor del progreso y el beneficio para el conjunto de la sociedad». Ha destacado la cesión reciente de suelo para uso ciudadano al barrio de Nazaret, con quien el Puerto «inevitablemente está en deuda».
Tras el acto institucional, a preguntas de los medios sobre el proyecto de la ampliación norte del Puerto de València, pendiente de su aprobación en el Consejo de MInistros, Calabuig ha señalado que la terminal «ya está hecha y ahora lo que hay que ver es compaginar todo el proyecto económico que hay alrededor de esa inversión y ver cómo alierse de la mejor manera posible con todo el entorno ciudadano y urvano para tener la mayor sostenibilidad posible».
Preguntado por si eso pasa por emitir una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA), Calabuig ha indicado que se está «pendiente de saber exactamente a quién se debe atribuir» esta decisión, en alusión al proceso abierto en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid que suspendió cautelarmente la resolución ministerial que establecía que la APV es el órgano sustantivo del proyecyo y debe determinar si se realiza una nueva DIA.
«En caso de que se atribuya al Puerto de València --ha explicado Calabuig--, nosotros evidentemente haremos el trabajo al que nos obliga la Ley, pero sobre todo lo que quiero es que en el futuro las DIAs no sean un arma arrojadiza; al contrario, deben ser un instrumento para garantizarnos a todos el estar seguros de que nuestro derarrollo es sostenible y equilibrado. Por lo tanto, ahí también debe haber todo el diálogo posible con el alcalde, Joan Ribó. Espero verle en los próximos días y hablaremos sobre esta cuestión».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.