Archivo - Imagen de archivo del traslado de piezas del Museo Arqueológico al centro logístico de La Rinconada. | María José López - Europa Press - Archivo

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La Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos del Ministerio de Cultura ha licitado por algo más de 26,6 millones de euros las obras de reforma y rehabilitación del Museo Arqueológico, cuyo plazo de ejecución es de 40 meses. Esta licitación coincide en el tiempo con la culminación de los trabajos de embalaje y traslado de las alrededor de 700.000 piezas con las que cuenta este Museo. Las tres últimas --las esculturas de Venus, Mercurio y Diana-- fueron trasladadas el pasado 30 de mayo.

Así consta en el anuncio de licitación publicado este lunes en la plataforma de contratación del Estado consultado por Europa Press. Fue el pasado 17 de marzo cuando el ministro de Cultura, Miquel Iceta, confirmaba tras una reunión de trabajo mantenida con el ahora alcalde en funciones, Antonio Muñoz, que la licitación del proyecto del arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra para el Arqueológico se produciría «antes de final de año». En el mismo encuentro, también se comprometió a que la ampliación del Museo de Bellas Artes cuente este mismo 2023 con una asistencia técnica del proyecto en el Palacio de Monsalves, ubicación por la que se decantan tanto el Ayuntamiento como el Gobierno.

El objetivo del proyecto de rehabilitación del Arqueológico es la integración del Museo --de titularidad estatal y gestión transferida-- en la corriente de museos de nueva generación, «capaces de lograr una mayor interacción social y reconocimiento cultural, de modo que sean inclusivos y receptivos a toda la ciudadanía», explicaba el Gobierno con motivo de la aprobación por parte del Consejo de Ministros de la autorización del contrato.

El edificio se construyó con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929 en el entorno del Parque de María Luisa, enfrentado al antiguo Palacio de Arte Antiguo o Pabellón Mudéjar, actual Museo de Artes y Costumbres Populares. Responde a un proyecto de estilo, imitando lo que los historiadores llamaron Renacimiento Plateresco, y sigue la línea del Pabellón Urioste de la Exposición de París de 1900 y del edificio Salaverry para Blanco y Negro.

Fue construido con materiales de poca calidad, como respondía a su condición de pabellón efímero. Se trata de una construcción exenta, longitudinal, rodeada de amplios espacios libres en todos sus frentes. Se compone de nueve cuerpos distribuidos de forma simétrica y longitudinalmente respecto de un eje central, marcado por el acceso principal. El gran cuerpo central se organiza en torno a un gran salón oval. En 1942 se trasladan al edificio las valiosas colecciones arqueológicas desde el Antiguo Convento de la Merced y se constituye como nueva sede del Museo Arqueológico de Sevilla.

Con el paso de los años, las colecciones fueron incrementándose con nuevos piezas, lo que llevó a lo largo de la segunda mitad del siglo XX a realizar diversas intervenciones para adecuar, ampliar, reparar y modernizar el edificio, según lo requerían las necesidades de la institución. El proyecto persigue solventar los déficits funcionales y técnicos del edificio con una actuación integral, que también busca revertir las sucesivas adiciones parciales realizadas. Además, se propone restaurar la imagen y espacialidad del edificio primitivo, mientras se mantiene el programa de usos optimizando su operatividad.

Por su parte, la Junta ha invertido 3,2 millones de euros desde 2019 en el traslado de piezas y adecuación de las mismas en el Centro Logístico del Patrimonio Cultural ubicado en La Rinconada (Sevilla). Éste es, en la actualidad, uno de los «más modernos e innovadores» espacios museísticos de almacenamiento, investigación e intervención que existen a nivel nacional. En sus 4.000 metros cuadrados se concentran, entre otros espacios, seis almacenes climatizados, 2.400 metros lineales de estanterías de paletización, 30 módulos de armarios compactos y más de 432 metros lineales de estanterías de media carga.

La evacuación del Museo Arqueológico de Sevilla se inició en 2020, coincidiendo con el cierre temporal del centro museístico. A partir de ese momento, se inició el proceso de embalaje y registro de las colecciones, compuestas por casi un millón de registros, al tiempo que se ejecutaron las obras de acondicionamiento y posterior equipamiento del Centro Logístico, que ya ha abierto sus puertas a los investigadores y, en breve, se iniciarán las visitas especializadas a este centro con la finalidad de que los ciudadanos puedan conocer las instalaciones de esta infraestructura cultural.