La operación comenzó a principios de abril de 2022, cuando los agentes hallaron una finca con más de 12.500 kg de marihuana en el término municipal de Ontinyent, ha informado el instituto armado en un comunicado.
Esta finca se trataba de una propiedad que, mediante procedimiento judicial, se había procedido a recuperar por su legítimo propietario. En ella, se encontró la sustancia vegetal que había sido abandonada precipitadamente.
Dicha sustancia fue llevada a analizar y se confirmó que no tenía un contenido relevante de THC, no obstante, estaba incluida en la lista I de la Convención Única de 1961 de las Naciones Unidas como estupefaciente.
Debido a la ingente cantidad hallada, su uso solo podría ser, según ha señalado la Guardia Civil, el de aumentar engañosamente el volumen de partidas de marihuana con contenido de THC destinadas al tráfico internacional de drogas o su desvío al mercado negro de CBD.
Fruto de las labores de investigación se pudo identificar a los propietarios, conocer el origen de la sustancia incautada y detener a siete personas vinculadas con la propiedad.
También se realizó un registro en una nave industrial en la localidad de Palma de Gandia, donde se guardaba material para el cultivo 'indoor' de cannabis y minado de criptomoneda.
Finalmente, la operación culminó con la detención de cinco hombres de edades comprendidas entre los 40 y 60 años de nacionalidades española y marroquí. Además, se ha investigado a dos hombres de 40 y 50 años y de nacionalidad marroquí.
A todos ellos se le atribuye un delito de pertenencia a grupo criminal, tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Ontinyent.
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