Una persona ejerce su derecho al voto en la Escola Grèvol, a 28 de mayo de 2023, en Barcelona, Cataluña (España). | Kike Rincon/Europa Press

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Vox ha descartado emprender acciones judiciales contra el recuento final de las elecciones municipales del 28 de mayo en Barcelona después de que la Junta Electoral Central (JEC) haya desestimado el segundo recurso que la formación presentó por el recuento, informa este miércoles en un comunicado.

De este modo, Vox rechaza impulsar un contencioso administrativo para impugnar el recuento de votos en la ciudad y la investidura será este sábado, puesto que si hubieran decidido tomar acciones legales la investidura se hubiera atrasado al 7 de julio.

En el mismo comunicado, la formación ha explicado que la JEC «ha revisado y ratificado el acuerdo de la Junta Electoral de Zona (JEZ)» y que ha decidido desestimarlo.

Lo ha hecho «de conformidad con el criterio consolidado por el cual solo se revisan aquellas actas de las mesas electorales donde se hayan hecho constar incidencias en la jornada electoral, hecho que no pudo producirse al no tener Vox suficientes apoderados y representantes electorales».

El motivo por el que Vox recurrió el recuento final fue por considerar que se incluyeron entre las papeletas anuladas algunas que eran válidas de su candidatura porque presentó dos papeletas: una con un recuadro en el logotipo y otra sin recuadro, ambas validadas por la JEZ, y por eso pidió abrir los sobres de todos los votos nulos (6.402).

Tres días de negociaciones

Con esta situación y ya sin la incertidumbre en el calendario, los partidos tienen ahora tres días para negociar un pacto de gobierno antes de la investidura, unas negociaciones que siguen abiertas y sin un escenario claro.

El desenlace pasa por distintas opciones: que el candidato de Trias por Barcelona, Xavier Trias, sea investido alcalde con 11 concejales al ser el más votado, sin un pacto alternativo que sume mayoría absoluta, y que se concrete un acuerdo de gobierno tras las generales.

Otra opción es la suma entre Trias per Barcelona y el PSC, con una mayoría de 21 concejales; y otra posibilidad sería un pacto de gobierno entre Trias y el candidato de ERC, Ernest Maragall, que suman 16 concejales, sin mayoría, pero con más margen para gobernar que los 11 de Trias en solitario.

Todo ello mientras la alcaldesa en funciones y candidata de BComú, Ada Colau, insiste en un pacto con ERC y PSC --que suman una mayoría de 24 concejales-- y en compartir la alcaldía entre los tres, una propuesta que el PSC ha rechazado y ERC ha negado haberla recibido formalmente.

Por otro lado, el candidato del PP, Daniel Sirera, mantiene su oferta al del PSC, Jaume Collboni, para apoyarlo aunque sin los comuns, una opción para la que faltarían siete votos para alcanzar los 21 de la mayoría necesaria.