El pasado 13 de agosto, una patrulla del SEPRONA encontró a estos hombres manipulando una 'red de libro', un entramado de palos y redes que los cazadores pueden manipular a distancia con la ayuda de cuerdas para atrapar pájaros vivos en una modalidad conocida como 'enfilat', explica el instituto armado.
Al mismo tiempo, los sospechosos tenían instalado otro medio prohibido de caza conocido como 'red japonesa' o 'de niebla', una malla vertical muy fina invisible incluso para la aguda visión de las aves.
Los agentes se aproximaron e identificaron a los cazadores, quienes carecían de licencia de caza o autorización del coto. Se contabilizaron ocho pájaros: siete de ellos enjaulados y uno atado a un palo en el suelo, usado en ese momento como reclamo, todos ellos propiedad de uno de los cazadores.
Además, en la caseta donde se agazapaban estos dos cazadores se halló un ejemplar de jilguero recién capturado que fue puesto en libertad.
Los sospechosos fueron investigados como presuntos autores de un delito contra la flora y la fauna, tras lo que las diligencias se remitieron al juzgado de guardia de Vila-real (Castellón).
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