El pleno Parlament vota sobre continuar la tramitación de la reforma legislativa para prohibir los 'correbous' | DAVID ZORRAKINO - EUROPA PRESS

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El pleno del Parlament ha aprobado continuar la tramitación de la proposición de ley de la CUP y los comuns para prohibir los 'correbous' en la playa, los 'bous capllaçats' y los 'bous embolats' en Catalunya, tradicionales en municipios de las Terres de l'Ebre (Tarragona).

La Cámara ha rechazado así sendas enmiendas a la totalidad de PP y Vox, que han recibido el apoyo de Vox, PP y Cs, el rechazo de CUP y comuns y la abstención de ERC, PSC-Units y Junts, aunque 4 diputados de ERC y 9 de Junts también han votado en contra.

Fuentes parlamentarias han explicado que Junts ha dado libertad de voto a sus diputados, y que también lo harán en el debate final de la proposición de ley.

En un comunicado, ERC ha detallado que «de forma acordada un grupo de diputados» ha votado en contra de la enmienda a la totalidad y que con la abstención han permitido seguir con la tramitación, y también han apostado por abrir el foco del debate sobre el bienestar animal.

Una década después de prohibir corridas

La iniciativa para abolir estas modalidades de 'correbous' llega al hemiciclo más de una década después de que el Parlament prohibiera las corridas de toros en Catalunya, en una votación en la que CiU y PSC dieron libertad de voto a sus diputados.

La proposición de comuns y CUP busca modificar la ley que regula los espectáculos con toros en Catalunya, que sí permite espectáculos que no terminan con la muerte del animal en municipios en los que existe esa tradición.

Su objetivo es excluir los 'bous capllaçats', los 'correbous' en la playa y los 'bous embolats' de las modalidades permitidas; de prosperar la reforma, la ley seguiría amparando los 'bous a la plaça', 'bous al carrer', el 'bou salvatge' y las exhibiciones de habilidad.

En los 'bous capllaçats', el toro corre por los pueblos con los cuernos atados con una cuerda; en el 'bou embolat', el animal es encerrado en una plaza o calles con estopa encendida en los cuernos.

Debate parlamentario

El diputado de la CUP en el Parlament Dani Cornellà ha señalado que «la cuestión de fondo no es si se trata de una tradición o no, sino qué sistema de valores esconde» la práctica de los 'correbous'.

Jéssica Albiach (comuns) ha asegurado que esta iniciativa no va en contra de los ganaderos y asistentes a estos eventos, y ha añadido que es una propuesta pensada para las «modalidades más agresivas», manteniendo los 'bous al carrer' y 'bous a la plaça'.

Desde Vox, Alberto Tarradas ha sostenido que «no se puede prohibir el sentimiento de un pueblo a golpe de ley», ha definido la cultura taurina como milenaria, y ha puesto en duda los votos del PSC, Junts y ERC, insinuando que estos grupos tendrán que decidir entre su ideología y los votantes que tienen en las Terres de l'Ebre.

Lorena Roldán (PP) ha apuntado que la propuesta va dirigida «únicamente a querer prohibir una fiesta» que, según ella, está muy arraigada en Catalunya.

El diputado de Cs Matías Alonso ha apuntado al 'pentapartito' (PSC, ERC, Junts, CUP y comuns) por ver a la tauromaquia «como un signo de identidad que debe extirparse de Catalunya», y ha señalado que, a su juicio, la Junta de Portavoces del Parlament ha tenido una actitud imparcial al darle prioridad a este debate.

Por parte del PSC, el diputado Joaquim Paladella ha avanzado durante el debate de la iniciativa la abstención de su partido con el objetivo de que, una vez superado el trámite a la totalidad este miércoles, se establezca una ponencia y un debate público para escuchar a todas las partes: «Si tenemos que legislar o tomar decisiones en un asunto como este, es lo mínimo que nos podemos exigir».

En la misma línea, Juli Fernández (ERC) ha valorado que la ley de 2010 de regulación de fiestas con toros se hizo trabajando con el Colegio de Veterinarios, entidades animalistas y peñas, y ha instado a volver a trabajar con todas las entidades y asociaciones con esta iniciativa: «Tendremos este debate y esta oportunidad para poder construir soluciones».

Desde Junts, Ester Vallès también ha apelado al debate y ha sostenido que «en los últimos años los 'correbous' han ido acompañados de una polémica muy controvertida», tras lo que ha pedido hacer compatibles los intereses de la sociedad que avanza y lucha contra el maltrato animal con los de un territorio que quiere mantener un elemento identitario, en sus palabras.