Los ilícitos contra el patrimonio fueron perpetrados en los últimos dos meses por todo el territorio nacional, dos en Zaragoza y otros tantos en Pamplona, también en Barcelona y Madrid, así como uno en Valencia, otro en Badalona (Barcelona) y un hurto en Logroño.
La operación denominada 'Recycle', llevada a cabo por el Grupo de Delincuencia Itinerante de Zaragoza, UDEV Logroño y UDEV Lleida, reveló que la totalidad de los robos fueron cometidos en el interior de establecimientos comerciales especializados en la venta de productos tecnológicos de segunda mano, de donde fueron sustraídos artículos por un valor total de 30.677 euros.
Los presuntos autores operaban por todo el país utilizando un mismo 'modus operandi', que consistía en acceder a este tipo de comercios y dirigirse directamente a las vitrinas de exposición donde se encontraban los teléfonos móviles de alta gama, donde observaban y seleccionaban los terminales que iban a sustraer.
Acto seguido, uno de los dos individuos sirviéndose de una ganzúa o llave, forzaba el cierre de seguridad de la vitrina y tras comprobar que no habían sido vistos por los dependientes de la tienda, sustraían los teléfonos escondiéndolos entre sus ropas y marchándose rápidamente del lugar.
Su itinerancia era la principal característica que les permitía no ser detectados, basando su estrategia delictiva en ejecutar varios robos si era posible en un mismo día en una localidad, abandonándola justo después para dificultar una posible identificación y detención por parte de la policía. Posteriormente vendían en otras ciudades los teléfonos robados a otros establecimientos de venta de segunda mano.
Los agentes consiguieron centrar y detener en la ciudad de Valencia a los presuntos responsables, a los que además de once delitos de Robo con fuerza, se les imputó otro delito de hurto cometido en una joyería de la localidad de Logroño, de donde sustrajeron varios relojes por un valor de más de 1000 euros.
Gracias a esta operación policial se ha conseguido recuperar más de una veintena de los teléfonos móviles sustraídos, así como la intervención de varias ganzúas y llaves maestras utilizadas para la comisión de los hechos.
Los detenidos, que contaban con numerosos antecedentes policiales por hechos similares, pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Valencia el pasado 9 de junio, quedando en libertad con cargos tras ser oídos en declaración.
Ese mismo día, ambos individuos fueron nuevamente detenidos por la Policía Nacional tras intentar cometer otro robo con fuerza de iguales características en un establecimiento comercial de la capital valenciana.
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