Tren de Metro de Madrid. | COMUNIDAD DE MADRID

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Metro de Madrid ha concluido el segundo Plan Renove de ascensores tras sustituir 10 elevadores por otros más modernos en las estaciones de la Línea 7 de Alonso Cano, Peñagrande, Antonio Machado y Guzmán el Bueno, unas actuaciones en las que se han invertido 1,8 millones de euros.

Los nuevos elevadores instalados tienen capacidad para 13 usuarios, aproximadamente, aportan un mayor número de maniobras y registran menos incidencias que los anteriores, además de mejorar la eficiencia energética.

En un comunicado, el Gobierno regional ha subrayado que todas estas características permiten una mejora en la calidad del servicio que se ofrece a los viajeros y exigen un menor mantenimiento. Además, ha resaltado, cumplen con el diseño fijado por la compañía metropolitana para estos elementos, con las máximas medidas de accesibilidad y seguridad.

En este sentido, los nuevos ascensores de estas cuatro estaciones de L-7 constan de señales lumínicas y acústicas, información en braille, locuciones destinadas a personas con discapacidad visual, y bucles inductivos, una tecnología que está introduciendo el suburbano en sus interfonos para favorecer la comunicación con ciudadanos con problemas auditivos.

Este proyecto también ha supuesto la sustitución e implantación de los suministros eléctricos, la adecuación de los sistemas de protección contra incendios y la renovación de equipos de comunicaciones.

Igualmente, ya se han integrado en el sistema de control de estaciones y en el Centro de Mantenimiento y Monitorización de Instalaciones y Telecomunicación (COMMIT) de Metro de Madrid, para su seguimiento.