En la junta municipal de distrito de Ciutat Vella se ha sometido a votación esta propuesta que realizó Barrera como vecino del distrito, que finalmente ha salido adelante por cuatro votos a favor y tres en contra gracias al apoyo del grupo mayoritario del equipo de gobierno presidido por Mª José Catalá (PP).
El conseller de Cultura realizó la propuesta el pasado abril para «difundir la cultura taurina», tras lo que la alcaldesa de València afirmó que no le parecía mal al tratarse de «una simulación» sin la presencia de «ningún toro». «No hay ningún peligro para la población infantil, ni mucho menos», remarcó Catalá.
Entre los grupos de la oposición, Compromís anunció la semana pasada que presentará una queja al Defensor del Pueblo si finalmente se aprobaba la celebración del encierro taurino infantil simulado en Ciutat Vella. Además, planteó cambiar la iniciativa por una jornada de respeto animal dirigida a los niños.
Tras la aprobación de la propuesta, el concejal de Compromís Giuseppe Grezzi afirma que se ha confirmado lo que ya preveían. «Catalá ha faltado a la palabra que dio a los vecinos y finalmente, en contra de lo que les prometió, el PP ha dado a Vox los votos necesarios para que la propuesta de hacer un acto de adoctrinamiento infantil en la tortura animal en Ciutat Vella salga adelante», denuncia.
Grezzi, en declaraciones remitidas a los medios, lamenta que «tan solo un día después de que la ciudadanía francesa diera un ejemplo de compromiso político con la democracia, Catalá sitúa a València en el extremo político diametralmente opuesto y hace de nuestra ciudad una de las ciudades en las que la ultraderecha gobierna con más desvergüenza».
«Aún nos quedan tres años de soportar esto, pero estamos seguros de que, por autoestima y responsabilidad democrática, las vecinas y vecinos de la ciudad no permitiremos que después de las próximas elecciones la extrema derecha vuelva a manchar el nombre de València con sus políticas y ocurrencias arcaicas y trasnochadas nunca más», concluye el edil de Compromís.
Por su parte, el portavoz municipal del PSPV Borja Sanjuán denuncia que es «una vergüenza» y «un despropósito» que «el PP de Catalá haya votado a favor de hacer cultura de la tortura, y además para los niños y niñas».
Además, Sanjuán reitera que los socialistas pondrán esta actividad en conocimiento del Defensor del Menor. «Vamos a intentar que la València casposa que está proyectando Catalá dure lo menos posible. Esta ciudad es mucho más avanzada y civilizada de lo que Catalá tiene en la cabeza», manifiesta en declaraciones remitidas a los medios.
Este mismo lunes, al vicepresidente y conseller de Cutura se le ha preguntado por la propuesta que ha llevado a la junta de distrito de Ciutat Vella. Barrera ha recordado que ha trasladado esta idea «como ciudadano de a pie» y como vecino del barrio, mientras ha criticado que en los años anteriores «se ha impuesto la censura y el pensamiento único».
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