Archivo - Imagen del servicio de atención de Salud Responde. (Foto de archivo). | JUNTA DE ANDALUCÍA - Archivo

TW
0

El sindicato UGT Andalucía ha revelado este viernes las «dificultades para conseguir una cita con el médico de Familia» en virtud a un estudio en más de 200 centros de salud que concluye que el 60% de las peticiones de cita reciben la respuesta de «en estos momentos, no hay profesionales disponibles» y el resto presenta «una demora de más de una semana como mínimo».

«Ésta es la dura y cruel realidad de los centros de salud en estos momentos. 'En estos momentos, no podemos ofrecerle este tipo de consulta para el profesional seleccionado. Recuerde que puede pedir cita con otros profesionales de su equipo de salud y citas para resolver gestiones administrativas' es la respuesta que dan en la aplicación Salud Responde, que más bien debería pasar a llamarse Salud No Responde», ha criticado la central sindical en una nota de prensa.

Esto ocurre en más del 60% de las consultas realizadas en 200 centros de salud de toda Andalucía, según el estudio realizado por UGT, y la «solución» que reciben los usuarios es «ir a su centro antes de las 8,00 horas, esperar pacientemente y ver si tienen suerte y le dan una cita para otro profesional; si no al día siguiente otro madrugón para ver si se consigue». En el otro 40% restante, «la normalidad es que si pides cita un 18 de julio te la den como pronto para el 30 de julio, con casos que se alargan hasta el 12 de agosto. Más de diez días de espera de media para una consulta», ha subrayado el sindicato.

Esta situación ha sido calificada por UGT como «nefasta gestión», motivada, a su juicio, por «la falta de sustituciones y el poco interés en mejorar la Atención Primaria, principales problemas que provocan estas demoras. No hay otra verdad que las citas que da la misma Consejería, mientras ésta »saca pecho« y vende las reducciones de listas de espera que cuestan cientos de millones de euros que ya sabemos de donde están salen», ha apostillado el sindicato ugetista en alusión a los conciertos sanitarios con la privada.