Vaquero ha intervenido brevemente antes de Azcón, realzado «el programa de presente y de futuro de Aragón», que se basa en una política de bienestar «con las partidas más altas de toda la Historia» para tener «los servicios públicos de calidad que merecen todos los aragoneses».
Otra clave es el impulso a la economía regional, incrementando la capacidad de atraer inversiones empresariales «en cantidades inéditas estos doce meses», acompañado de una fiscalidad «justa», dirigida a las empresas, «generadoras de recursos y empleo», también «al bolsillo de todos los aragoneses».
A esto se suma un conjunto de iniciativas para mejorar las infraestructuras, «tan necesarias», en alusión expresa a las carreteras, refiriendo a continuación la vivienda, para «responder a las aspiraciones de las familias y los jóvenes».
Vaquero ha realzado las políticas de cohesión territorial, como es el Plan Pirineos, para «generar oportunidades en el medio rural para todos aquellos que elijan vivir en un determinado sitio», así como el Fondo de Transición Justa para llevar a cabo «el cambio de modelo productivo», basándolo en la sostenibilidad y la digitalización, lo que requiere «permeabilizar a todos los sectores».
«Los meses han pasado con muchísima rapidez, parece que fue hace unas semanas cuando este Gobierno tomó posesión», ha comentado la vicepresidenta, indicando que han sido muchas las iniciativas implementadas y que «la ilusión» se puede ver en la cara de los consejeros, así como su responsabilidad.
«El cambio más importante», ha considerado, ha sido que el Gobierno de esta legislatura actúa con «responsabilidad, compromiso y lealtad» y para todos los aragoneses con el objetivo de mejorar la vida de todos los ciudadanos y «resolver problemas».
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