Las investigaciones arrancaron cuando los agentes tuvieron conocimiento de que podrían estar almacenándose o incluso produciéndose falsificaciones en dos naves de los polígonos industriales de Manises y Puzol.
Por ello, realizaron dos registros a mediados de julio que permitieron la aprehensión de abundante material falsificado antes de su puesta en circulación, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.
En una de las naves incluso se encontró una sala en la que se ensamblaba y empaquetaban muñecos falsificados para su posterior comercialización. Estos estaban especialmente destinados a los proveedores de venta itinerante e inducían al error sobre su autenticidad.
«Las falsificaciones causan graves perjuicios económicos a las marcas, pero también reportan riesgos a los consumidores, pues a menudo el embalaje y las calidades del producto son deficientes y pueden suponer riesgos especialmente para los más pequeños», ha explicado la Benemérita en un comunicado.
Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 02 de Quart de Poblet.
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