El coordinador general de Izquierda Unida Andalucía, Toni Valero, ha asegurado este miércoles sobre el acuerdo para la financiación de Cataluña alcanzado entre el PSC y ERC, con la idea de recaudar el 100% de los impuestos y hacer a posteriori una contribución solidaria a la financiación común, que «no soluciona» la infrafinanciación de Andalucía, por lo que ha demandado «un debate amplio que tenga en cuenta al resto de territorios y sus necesidades».
De igual forma ha recriminado al Gobierno andaluz que «recibe transferencias históricas» del Gobierno español de las que ha augurado que «de nada servirá» por cuanto su destino es «privatizar servicios públicos y a bajar impuestos a las rentas más altas».
En una nota de audio remitida a los medios de comunicación, el también diputado de Sumar en el Congreso ha considerado que en el caso de Andalucía «el principal problema lo tenemos en un Partido Popular que, lejos de intentar llegar a acuerdos con el Gobierno, se dedica a utilizar la Junta de Andalucía de forma partidista para hacer oposición política».
El coordinador de IU de Andalucía ha indicado en consecuencia que «el problema es de modelo» ya que la hoja de ruta que sigue el PP al frente de la Junta de Andalucía les lleva a «bajar impuestos a los ricos en Andalucía en lugar de fortalecer los servicios públicos».
«No puede pedir con una mano mientras regala con la otra», ha advertido en ese sentido, aun cuando ha planteado que «la singularidad de Andalucía merece una especial atención», una conclusión que ha concretado en describir a la región como «desindustrializada», de manera que por eso «hemos tenido un grave problema de desempleo, precariedad, pobreza y desigualdad».
A su juicio, «la vertebración territorial» de España necesita «más inversión» en comunidades autónomas como Andalucía para «reducir esta brecha económica y social».
Ha sostenido que «defendemos un modelo de financiación basado en la solidaridad y la vertebración territorial», antes de concluir que «el sistema actual no funciona», cuya vigencia quinquenal expiró en 2014, por cuanto «deja a varias comunidades autónomas, Andalucía entre ellas, infrafinanciadas».
El líder de IU Andalucía ha argumentado que ese nuevo modelo de financiación debería caracterizarse por «la inversión en los servicios públicos para que esas transferencias repercutan en la ciudadanía», para advertir seguidamente sobre la tentación de gobiernos regionales de «reducir impuestos a las élites económicas agravando la desigualdad social».
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