Archivo - Entrada de la Cárcel de Valdemoro/Centro Penitenciario Madrid III, en Valdemoro (Madrid) a 6 de marzo de 2020. | Jesús Hellín - Europa Press - Archivo

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Un interno de la cárcel de Valdemoro intentó estrangular ayer por la tarde a un jefe de Servicios y lesionó a otros dos funcionarios, han informado en sendos comunicados los sindicatos ACAIP-UGT y CSIF.

Los hechos ocurrieron en el módulo 8. Un preso, E.M.B, se abalanzó sobre otro, propinándole dos puñetazos en la cara. Los funcionarios de servicios acudieron para evitar que continuara la agresión y separar este reo del resto de la población reclusa, a lo que se negaba.

Al llegar a la puerta del patio, el mismo interno se abalanzo contra los funcionarios con la intención de agredirlos. Al lugar acudió rápidamente jefe de servicios, que empezó a ser estrangulado por el reo a través de la técnica del «mataleón».

Otros trabajadores rescataron y separaron al jefe de servicios rápidamente de su agresor. En el forcejeo resultaron lesionados una empleada y otro empleado. Los tres lesionados han necesidado asistencia médica.

El domingo, en la misma cárcel, un funcionario resultó agredido y otro amenazado de muerte durante una pelea entre presos, según informó CSIF Prisiones Valdemoro, que criticó que el agresor solo pasó 24 horas en aislamiento y no ha sido trasladado a otro centro penitenciario. Lo han llevado por Orden de Dirección al Módulo 9 de Valdemoro, «donde se encontrará nuevamente con el funcionario».

«Estas son las consecuencias de las políticas buenistas de las Direcciones de los centros, que están provocando una mala clasificación interior con cada vez más agresiones y menos respeto a la figura del Funcionario de Prisiones que carece de la condición de autoridad, con una formación inadecuada y escasos medios materiales», ha indicado el sindicato, que pide una mayor condición de autoridad, así como más medios, formación y recursos para el personal penitenciario.

Por su aprte, desde ACAIP-UGT han denunciado la «grave situación »que se vive en la prisión de Madrid III, con acumulación de presos conflictivos en determinados módulos «que generan incidentes continuos».

«La política 'buenista' que se está practicando en las prisiones españolas está derivando en problemas de seguridad no solo hacia los trabajadores, sino también entre internos. Se promueve, desde las direcciones de los centros, una clasificación interior que no atiende al perfil individualizado del reo, obviando aspectos tan básicos reconocidos en nuestra legislación como la separación entre internos preventivos e interno penados», señalan.

A esto se suma, continúa el sindicato, el elevado número de presos con problemas mentales que conviven con el resto de población reclusa y el déficit de la sanidad penitenciaria, "que ya supera el 65 por ciento de falta de médicos.

«Todos estos aspectos, cuando se combinan en un módulo conflictivo como el número 8 de la prisión de Valdemoro en el que se mezclan internos multireincidentes, con presos primarios y reos con tratamientos psiquiátricos generan un caldo de cultivo propicio a los incidentes graves», esgrimen.

Por ello, ACAIP-UGT exige que la clasificación y separación interior de los internos atienda a la realidad de los perfiles de los presos, se aplique la individualización científica que establece nuestra Ley y el principio unicelular de un interno por celda, así como que se den las soluciones al déficit sanitario en las prisiones españolas. «En caso contrario, seguiremos soportando la creciente conflictividad en las prisiones españolas y la falta de seguridad en los centros con consecuencias imprevisibles», añaden.