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La galería Christie's de Londres inició ayer una semana de ventas con una subasta de arte moderno e impresionista en el que se pusieron a la venta un total de 39 lotes, de los grandes maestros de las vanguardias históricas, impresionistas y surrealistas, de los que 18 quedaron sin vender. La estrella de la jornada fue la obra «Femme dans un fauteil», que fue pintado por Pablo Picasso en 1932 y que ha sido vendido por 6.100.000 euros. En la subasta también se vendió el cuadro de Pierre-Auguste Renoir «Canotiers à Argenteuil», un óleo sobre tela de 50,2 x 61 cms. y pintado en 1873 que alcanzó un precio de 3.669.000 euros.

En el acto salió a la venta, a un precio de entre 2 y 3 millones de euros, un retrato de Lunia Czechowska, de Amedeo Modigliani, que no llegó a venderse.

Acto seguido se inició una subasta de arte surrealista, donde la estrella fue «Les barricades mysterieuses», de René Magritte, que se vendió por 2.900.000 euros. El cuadro de Miró «Le réveil des oiseaux II» se vendió por 198.000 euros. También se subastó un Tàpies de 1950, «Paisatge», por 152.000 euros y una obra de Paul Delvaux, «La fin du voyage», por 600.000. Esta obra tiene la particularidad de que aparece un tranvía que recuerda al de Sóller.