El presidente de la entidad, Jaume Pérer Muntaner, explicó que
«este canon tiene que ser pagado por la administración de cada país
en cumplimiento de la normativa europea. En ningún caso es dinero
que tenga que pagar ni el lector ni la biblioteca. El canon
funciona de diferentes maneras. Por la presencia de un libro en una
biblioteca se pagan unos derechos anuales a sus autores y editores,
y por el número de consulta otra cantidad. Es como el canon de las
fotocopiadoras. Por cada máquina que se vende hay un capital que se
destina a pagar un canon cuyo propósito es compensar la pérdida de
la venta de libros que en vez de ser comprados son fotocopiados».
El pago del canon en las bibliotecas públicas continúa
enfrentando de forma a escritores y administraciones. La decisión
de la Unión Europea de llevar a los tribunales el estado español,
Portugal e Irlanda por no pagar el canon contribuye a encender
todavía más la polémica.
La Unión Europea especifica en su legislación que todo préstamo
público de un producto sometido a la propiedad intelectual tiene
que dar un rendimiento a sus creadores. La legislación incorpora
así una enmienda hecha por las socialdemocracias de los países
nórdicos. En todos estos países son las administraciones los que
asumen el coste de este canon.
La vicepresidenta de los escritores en lengua catalana, Antònia
Vicens, explicó que la asociación está completamente a favor de que
se pague el canon y que, incluso, se ha hecho una activa campaña al
respecto. «Tenemos que tener en cuenta que los escritores siempre
somos los más perjudicados, tanto por los contratos de edición como
por el hecho que no se nos paga nada, tal como exige la Unión
Europea, por los préstamos de nuestros libros en las
bibliotecas».
La directora general de Cultura del Ejecutivo balear, Catalina
Sureda, apuntó que «el Govern ya explicó en su momento su postura e
hizo una recogida de firmas contra el canon». Para Sureda, su
imposición sería «una medida totalmente negativa». La directora
general cree que todas las instituciones coinciden en la necesidad
de fomentar la lectura entre la sociedad y que «el canon no hace
nada más que poner trabas a este objetivo». Para ella, el camino
correcto es la promoción de campañas como la que ha hecho el Govern
balear y también el recién creado Institut d'Estudis Baleàrics.
El director insular de Cultura del Consell de Mallorca, Guillem
Ginard explicó que «ejemplos como éste son los que demuestran que
tenemos otra concepción de las cosas. Para países como España o
Portugal, el acceso a la cultura tiene que ser libre y gratuito.
Sin embargo, si en Europa hay una directiva, las instituciones
competentes asumirán el pago del canon». Lo que el director insular
quiso dejar claro en todo momento es que no se hará pagar a la
sociedad «porque esta situación nace de una cultura donde no
queremos obligar a pagar por acceder al conocimiento». Ginard
también quiso remarcar que el Consell de Mallorca apoya a la
asociación de bibliotecarios y archivistas « y entendemos que los
autores tienen que estar protegidos. La gente puede estar
tranquila, podrán continuar yendo a la biblioteca y acceder a sus
libros de manera gratuita».
El concejal de Cultura del Ajuntament de Palma, Rogelio Araújo,
explicó que «esto de llevarnos al juzgado es un simple formalismo».
Asimismo sentenció que «lo que tiene que hacerse es cambiar la
normativa europea» y añadió que «en ningún momento tiene que
decidirse pagar el canon porque es poner trabas a la lectura. En el
pleno ya se votó la propuesta contra el canon».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.