El Casal Solleric inaugura hoy sus tres primeras exposiciones de
2005. La planta noble acoge «Maestros del arte en el cartel», una
muestra basada en la colección de José Luis Rupérez; la planta baja
y el entresuelo, los finalistas del Premi Ciutat de Palma Antoni
Gelabert, entre ellos el ganador, Nono Bandera; y, el Espai Quatre,
«Les fleus du Petit Mal» de Jaume Pitarch.
«Maestros del arte en el cartel» presenta «un paseo por el arte
desde finales del siglo XIX y hasta hoy», explicó Rupérez. Empieza
con algunos affiches de la denominada edad de oro del cartel, con
autores como Toulouse-Latrec, Bonnard o Casas, y finaliza con una
obra de 2004 de Mariné que representa el 11 de marzo. En total,
contiene 175 piezas de diferentes temáticas. Picasso, Matisse,
Chagall, Dalí, Calder, Chillida, Magritte o Warhol también están
representados.
La planta baja y el entresuelo del Solleric albergan las 27
obras finalistas del Antoni Gelabert, entre ellas, «El gigante», de
Nono Bandera. «Llevo años trabajando la idea del reciclaje,
comprando obras ya terminadas e intervengo sobre ellas», dijo el
artista. Sin embargo, para los Ciutat de Palma optó por ir más allá
y salirse de «los límites naturales del cuadro». «El gigante» es
una obra en técnica mixta de gran tamaño, que representa un clásico
salón, elaborado con rotulador negro sobre papel y sobre la cual se
incrusta un óleo en color sobre tela, que realza todo el
ambiente.
Por último, el Espai Quatre acoge «Les fleurs du Petit Mal». «La
muestra se basa en las ideas del orden, la visibilidad y la
invisibilidad», dijo Pitarch. Unos conceptos que están presentes en
el día a día del autor, aquejado de una enfermedad que le hace
tener pérdidas de consciencia. «Por eso mis piezas hablen del
retorno, de cómo la realidad regresa tras irse».
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