14/10/07 0:00
TW
0
MARIANA DÍAZ/EFE Josep Bargalló, director del Institut Ramon Llull (IRL), dijo ayer en la Feria del Libro de Fráncfort que la presencia de la cultura catalana como invitada de honor en el gran mercado editorial había constituido un «éxito» y que unas 2.600 personas habían acudido a los actos literarios. De toda esta gloria de conjunto, Balears se lleva su parte alícuota. Sebastià Serra, presidente del Institut d'Estudis Baleàrics (IEB), comentaba ayer desde la feria que la presencia de la cultura balear se cerraba con un saldo «positivo».

Mientras el público pudo acceder ayer por primera vez a la feria, ya que hasta ahora las jornadas habían estado sólo dedicadas a profesionales del sector editorial, el programa balear continuaba a buen ritmo. La escritora Rosa Planas participó en una concurrida mesa redonda bajo el lema Atlas de la literatura catalana, junto con los escritores Lluís Lluís, Antoni Morell y Martí Domínguez, moderada por Still Stegman.

También los escritores baleares que escriben novela negra tuvieron su espacio en el Forum. Guillem Frontera y Maria Antònia Oliver compartieron reflexiones con Andreu Martí, Teresa Solana y Albert Villaró.

Por la noche estaba prevista la actuación de Maria del Mar Bonet, que ya participó en la ceremonia inaugural, junto al catalán Miquel Poveda, quienes presentaban su espectáculo Els treballs i els dies, así como la del pianista Joan Moll.

Hoy cierra la feria con la participación estelar del escritor Baltasar Porcel, encargado de dar el testigo al país invitado en 2008, Turquía, pero antes tomará parte en la lectura de su obra Cavalls cap a la fosca. Porcel y el escritor turco Elif Shafha debatirán sobre la literatura como punto de unión de las patrias europeas.

En cuanto a la presencia institucional, esta mañana, Maria Antònia Munar, presidenta del Parlament, acudirá a la presentación del libro Mallorca eròtica, de Joan Bennassar y Felip Munar, y visitará el expositor del IEB, donde ayer la promoción se centró en otros productos culturales de las Islas como la música, con en una amplia muestra de discos compactos, y en los libros de arte como los aportados por Taller 6a.

Según Sebastià Serra, las grabaciones de obras del compositor Antoni Torrandell y un CD del barítono menorquín Joan Pons «interesaron» en Alemania.
Serra destacó los «contactos» que han hecho los editores, aunque sin olvidar que en el mundo editorial «los frutos de los mismos se ven a más largo plazo», y la forma en que «algunos escritores se movieron por su cuenta» también en busca de estrechar lazos con editoriales de otros países.

Para Serra, el viaje balear a Fráncfort ha resultado «positivo» desde todos los puntos de vista y ha significado que «ahora nos conozcan por algo más que por el turismo». Las traducciones de autores al alemán; los actos en los que participaron los escritores, «con una participación de público más que notable»; las exposiciones y los actos musicales estuvieron a la altura que la ocasión requería. Su deseo, para 2008, es que «el IEB o la Comunitat Autònoma pueda tener stand propio» en esta feria, elmayor mercado editorial del mundo concentrado en una intensa semana de negocios e intercambios.