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J. CLIMENT Un flujo de fuera hacia dentro, una entrada. Ése es el significado de Influx, un concepto que bautiza la próxima aventura del arte balear en el extranjero promovida por el Institut de Estudis Baleàrics.

El proyecto Influx: Visiting Artists llevará a Londres el trabajo de cinco de los más prometedores artistas visuales, Amparo Sard, Mònica Fuster, Teresa Matas, Pep Guerrero y Marian Moratinos. Sus obras podrán verse del 11 al 25 de mayo en The Old Truman Brewery, una antigua fábrica de cerveza ubicada en el famoso barrio de Brick Lane. Si en el pasado Brick Lane acogió a «inmigrantes, disidentes políticos e intelectuales», explicó la comisaria, Eva Shakour. Ahora se ha convertido en el centro neurálgico de los artistas emergentes. Un sitio totalmente cool, como allí suele decirse, con amplios espacios expositivos, talleres y calles que albergan el arte urbano de artistas de moda como de Banksy y Obey.

En la exposición, Amparo Sard mostrará su vídeo Con el Agua al Cuello y la serie La Mujer Mosca; Mónica Fuster expondrá obras en papel, una instalación de placas de metacrilato e iluminación sincronizada y la videoproyección Traç; las obras de Marian Moratinos consistirán en una instalación de vigas y otra de cubos entorno a la relación de la arquitectura con el individuo; el arte kitsch de Pep Guerrero lucirá sobre dos originales soportes, un Ping Pong y un Futbolín; y, por último, Teresa Matas contará con obras sobre papel y la instalación que «invitará a los visitantes a vaciarse de sus temores y salir en paz», explicó.