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C. HEREDIA Puntuales se abren las puertas del patio de La Misericòrdia. En su interior, se podían ver los Seat 600, los Minis y algunas Vespas, que hicieron del pasado el presente de una década marcada por la música. Ayer se inauguró el festival Mallorca Ye-Ye!, una fiesta para recordar los años sesenta con la música de Los Salvajes y Gatos Negros.

«Este festival reúne muchas ilusiones, la gente viene a vernos con muchas ganas de recordar viejos tiempos», explicó el guitarrista Quique Tudela. «Estas son fiestas que se deberían hacer más a menudo y en más sitios», comentó Gabi, la voz de Gatos Negros.

El festival, que también cuenta con una exposición de discos y fotografías de la época, finalizará en noviembre y nace con la intención de «reivindicar y dar relevancia a un colectivo que estaba olvidado, el de la segunda y mediana edad», señaló Tolo Aguilar, cap de Relacions Ciutadanes de Presidència del Consell.