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El primer Certamen de Pintura Ràpida de Palma, organizado por la regidoria de Participació Ciutadana del Ajuntament y celebrado ayer, resultó un auténtico pinchazo. El evento fue planteado como un sucesor de la Trobada Internacional de Pintors, que organizaba anualmente la Asociación de Bellas Artes de Baleares hasta el fallecimiento de su presidente, Juan García Orell, en julio del año pasado. La Trobada, un evento consolidado, contó en 2008 con 131 participantes. Su heredero, que pretendía «reconocer y recoger» la labor de García Orell, tuvo ayer una capacidad de convocatoria mucho más discreta: 29 inscritos. Esto supone una reducción del 77% en el volumen de participantes.

 

El regidor Eberhard Grosske, responsable de la iniciativa, departió ayer con algunos de los participantes, comentando que «teniendo en cuenta que es la primera edición, la cifra no está mal». Uno de los pintores, el francés Jack Salomón, coincidió con Grosske en que «es difícil que la gente salga a la calle a pintar», pero otro de los participantes, más veterano, apuntaba que «con buena organización y promoción sí se consigue motivar a los interesados».

 

Madrugadores

Más allá de las cifras, los artistas -en su mayoría aficionados al arte, no profesionales- pasaron una entretenida mañana repartidos entre el Born, S'Hort des Rei i Dalt Murada. La mayoría de ellos plantó su caballete de buena mañana, «aprovechando la sombra, la tranquilidad y la luz de la mañana», comentaba Margalida Juan, quien, con la experiencia de una veterana, pintaba por primera vez en la calle.

 

En unas dos horas Alberto Iglesias pintó el Palau de l'Almudaina, pero el argelino Hauarni Hamar fue mucho más veloz, y en 20 minutos ya lo tenía bien adelantado. En el otro extremo, Miquel Àngel Oliver, adolescente de Algaida, se tomó con mucha más paciencia su dibujo a tinta de las leonas del Born. Catalina Serra, que comenzó a pintar a las 8 de la mañana, disfrutaba con el frenesí que supone «tener que pintar rápido, sin la calma que te da estar en casa». La mayor parte de los concursantes se decantaba por la unión de edificios i vegetación, y optaron por el acrílico, que se seca más rápido. Algunos, eso sí, se decantaron por el óleo o la acuarela.

 

El jurado del Certamen eligió ayer tres obras ganadoras, que se darán a conocer el día 11. Como marcan las bases, la organización ha seleccionado otras 25 obras como finalistas para que el público elija entre ellas sus favoritas. Esto significa que, como finalmente hubo sólo 29 participantes, un único participante no entró en el grupo de finalistas al premio del público.