Se trata de una pieza de bronce fundido de color natural de dos metros de altura, apoyada sobre una peana de 1,5 metros que se situará a la izquierda del pasillo que une las facultades de Filología y Comunicación.
Jaume Plensa ha explicado que el nombre de Arrels se debe a que la universidad es «un lugar donde compartir conocimiento» y que la misma «nos da un sentido y una dirección».
Arrels representa un cuerpo humano formado por letras y caracteres de nueve alfabetos diferentes (árabe, chino, cirílico, griego, hindi, tamil, japonés, hebreo y latino) como metáfora de la diversidad de orígenes y culturas del mundo.
En este sentido, el rector de la UB, Joan Guàrdia, ha destacado la respuesta «amable y colaboradora» del artista para crear un nuevo «elemento simbólico» en el edificio.
Por su parte, el teniente de alcalde de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Valls, ha remarcado que la nueva creación tiene «connotaciones lingüísticas, naturales y humanistas», vinculando las raíces «al origen, el lugar donde venimos».
Se trata de la segunda cesión del autor después que el pasado mes de septiembre cediera la instalación El cor secret a la UB y al Hospital Clínico con motivo del Día Mundial del Corazón.
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