La denunciante, que no ha querido que se divulgue su identidad, acusa al actor de constantes tocamientos y de proferir comentarios obscenos y de contenido sexual tanto en París como durante el rodaje del cortometraje 'Le magicien et les siamois', de Jean-Pierre Mocky, que se llevó a cabo en 2014 en la localidad de Doué-en-Anjou.
La asistente de rodaje ha contado a Le Courrier de l'Ouest que tuvo que sentir "sus garras por todas partes" en su cuerpo y se vio obligada a callar por haber sentido "vergüenza" en aquel momento.
Esta nueva demanda tiene pocas opciones de prosperar, ya que los hechos en cuestión habrían prescrito, como ya ocurrió con otra denuncia presentada contra Depardieu en 2023 por la actriz Hélène Darras, referida también a hechos de 2014.
Al margen de esas dos querellas, otras dos mujeres han denunciado al actor de 75 años por violación.
La primera fue la actriz Charlotte Arnould, que denunció en 2018 a Depardieu por violación y por agresión sexual, un procedimiento por el que el intérprete quedó imputado en 2020.
En 2023 las acusaciones por agresiones sexuales y comportamientos indebidos contra esta figura anteriormente considerada icónica del cine francés proliferaron gracias a investigaciones periodísticas. Al margen de la de Darras, se interpuso otra querella por violación contra él en España.
La denunciante fue la periodista y escritora española Ruth Baza, que demandó al actor en diciembre pasado ante la policía de Torremolinos (Málaga, sur de España) por unos hechos presuntamente ocurridos en París en 1995.
El actor que protagonizó "Cyrano de Bergerac" (1990) defiende su inocencia y, respecto a la nueva querella, el abogado de Depardieu, Christian Saint-Palais, ha explicado que se ha enterado de la nueva acusación a través de la prensa.
2 comentarios
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Después de 10 años 10 ? Igual la pobre va mal de fondos.
Mucho cuento, y lo dice 10 años después? Tiene que denunciarle al momento de ocurrir los hechos y sie.pre con pruebas. No se como ewtara la legislación sobre esa materia en Francia, pero vamos como sea como en España mal vamos