La Fundación Kühne reclama su aportación para la Caja de Música y el Govern asumirá el gasto

Así lo ha explicado Jaume Bauzà, conseller de Turisme, Cultura i Esports del Govern Balear durante la presentación de la nueva temporada de conciertos de la Orquestra Simfònica de les Illes Balears, que será la anfitriona de la futura Caja de Música. Bauzà ha reafirmado el compromiso del ejecutivo tanto con la Simfònica como con hacer realidad su futura y esperada sede.

Preguntado por la situación de las obras, Bauzà desveló que desde el primer día que estuvo al frente de la conselleria que ocupa se puso a presionar a la empresa encargada de las obras debido los retrasos en los avances. Tal y como ha señaado Bauzà, la presión llegó a tal punto que dicha empresa finalmente reconoció que no se veían capacitados para acabar el trabajo, por lo que se resolvió el contrato con ellos y ahora, en un periodo de aproximadamente tres meses, se llevará a cabo una nueva licitación tras ejecutarse unas obras de emergencia que necesita el edificio.

Debido a estos contratiempos, se ha dilatado el plazo de las obras, razón por la cual la Fundación Kühne había pedido al Govern la devolución del dinero aportado, que como decimos ascendía a 660.000 euros de una inversión total de 2 millones, y el Govern ha accedido a dicha petición que se ha resuelto este jueves. Por lo que, tal y como ha dicho Bauzà, 'la Fudnación Kühne se descuelga hoy y el Govern asume su aportación' para a construcción de la Caja de Música.

También se ha referido Bauzà a dicha demora en las obras como algo que 'solo va en contra de los ciudadanos', ya que el objetivo es dotar a la Simfònica de les Illes Balears de una casa en la que pueda actuar, ensayar y recibir a otros artistas y a su público.

Cabe recordar que la financiación de la Caja de Música es el resultado de la colaboración público-privada con un coste global presupuestado de 10,5 millones de euros, de los cuales el Govern aportaba 6 (ahora 8) y que se cofinancian con los Fondos Europeos, una aportación que no peligra. Los cuatro millones restantes debían venir entre la Fundación Turística i Cultural (Fundatur) y la Fundación Kühne que ahora se ha retirado.