El cineasta Josep Alorda. | M. À. Cañellas

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El cortometraje del mallorquín Josep Alorda, Guaret, que adapta la obra teatral del mismo nombre del dramaturgo Pedro Mas, ha sido proclamada en un evento realizado en Eivissa como la obra ganadora del Premi Art Jove, dotado con 3.000 euros y otros 7.000 para financiar un próximo filme.

El filme es bastante experimental, centrado en las imágenes de archivo y documental doméstico que pretende una búsqueda de la identidad. La obra teatral de Mas, que Alorda pudo ver representada y por la cual se sintió interpelado, trata precisamente la pregunta de quién es el autor de la misma a través de la figura paterna y la poesía de Damià Huguet. La mallorquinidad y la esencia local forman parte central del texto de Mas.

En el caso de Alorda, sin perder estas ideas, se hace con la historia para hacerla suya, una petición que le hizo expresa el propio Mas cuando hablaron de las primeras versiones de la adaptación, para hablar de sus propias inquietudes. Así pues, a través de las imágenes cedidas al Arxiu del So i la Imatge de Mallorca, Alorda configura una película que trata la pérdida de una forma de vida y de su huella todavía presente.

El segundo premio, dotado con 2.000 euros, recayó en Mare de Déu, del también mallorquín Jeroni Puigrós, y el tercero, con 1.000 euros, ha sido para Tem, de Diego Poncelet, también isleño y que presentó el filme en el Atlàntida Film Fest.

Hablando del Atlàntida, en ese festival Guaret se llevó precisamente una mención especial, algo que Alorda recibió como si fuera el premio gordo prácticamente. Por su parte, Dansa Abissal, de Margalida Batle, fue reconocido con una mención especial en el Art Jove sin dotación económica.

El jurado estaba presidido por el director de cine y guionista David Mataró y formado por la actriz Aina Frau; el productor y director de cine Nofre Moyà; la directora del Ibicine Festival, Helher Escribano; y la ganadora del certamen de cortometrajes de la pasada edición, Maria Badia.