Se considera que una pyme es innovadora cuando concurre alguna de las siguientes circunstancias: en primer lugar, si ha recibido financiación pública en los últimos tres años a través de las distintas convocatorias públicas estatales o de la Unión Europea (Programa Horizonte 2020). Igualmente se considera pyme innovadora si tiene una patente propia. Y también si dispone de certificaciones de calidad AENOR de joven empresa innovadora, pequeña o microempresa innovadora, o de sistemas de gestión de la I+D+i.
Una pyme que reúna los requisitos puede solicitar la obtención del sello de pyme innovadora y su entrada en el Registro de la Pequeña y Mediana Empresa Innovadora. El registro es telemático y gratuito a través de la web del Ministerio.
La inscripción permite a estas pymes disfrutar de importantes beneficios fiscales y bonificaciones en las cuotas de la Seguridad Social, con medidas reguladas en el artículo 6 del Real Decreto 475/2014, sobre bonificaciones en la cotización a la Seguridad Social del personal investigador.
También permite utilizar el logo en el material publicitario y exponerlo en la sede.
Balears cuenta con 30 de ellas que ya han obtenido el sello de pymes innovadoras a día 30 de agosto. La mayoría se centran en los ámbitos de las TIC y la bioeconomía, un sector emergente que abarca desde la salud hasta el desarrollo sostenible. A finales de 2016 eran solo 14 las empresas de las Islas inscritas, de manera que en un año y medio la cifra se ha más que duplicado (+114%) y en el último mes se han sumado tres nuevas compañías.
El Govern balear ha mantenido varias reuniones con el Ministerio para aumentar las posibilidades de obtener el sello de pyme innovadora. En concreto, ha solicitado que se valore como un requisito el hecho de haber obtenido financiación autonómica para proyectos innovadores. Se beneficiarían de esta opción todas las pymes de España que cumplieran el requisito.
El Govern balear es optimista respecto a la situación de la I+D+i. Maneja unas estadísticas que van más allá del 0,33% de inversión en investigación, desarrollo e innovación sobre el PIB. Indica que en 2016 se invirtieron 94.568.000 euros en I+D, y que con esta cifra, Balears es la cuarta comunidad que más crece en I+D (+6,09%). En 2015 se rompió la tendencia negativa que presentaba la inversión con un incremento del 4,46% del gasto. En 2016 también fue la región donde más se incrementó el gasto en I+D en el sector empresarial (+41%), a pesar de que representa solo el 20,20% sobre el total, cuando a nivel nacional supone el 53,98%.
LOS SERVICIOS LIDERAN. Balears tiene una presencia limitada de industria manufacturera de alto conocimiento que la sitúa a la cola en España. En cambio, la mayoría de empresas de alto conocimiento son del sector servicios, representando el 17,79% del total de empresas, “solo ligeramente” por debajo de la media española. Están concentradas en su mayoría en Palma.
Asimismo, el Archipiélago cuenta con 1.538,7 investigadores, según datos de 2016. En este sentido, el Govern lamenta que la poca presencia de investigadores y recursos humanos altamente cualificados sea una de las principales debilidades de la economía balear, ya que los trabajadores con educación terciaria o del sector de la ciencia y la tecnología son solo el 26,7%, frente al 32% español y el 32,4% de la Unión Europea.
