La exclusividad al nivel más selectivo fue la nota que caracterizó ayer el animado panorama crucerístico de este mes de septiembre en el puerto de Palma. El novísimo Silver Shadowentregado hace apenas dos semanas por los astilleros Mariotti de Génova (y cuyo nombre coincide con un modelo de Rolls Royce), llegó a Mallorca en su viaje inaugural.
Su presencia fue obsequiada con una metopa conmemorativa por parte de la Autoritat Portuària. A bordo viajan 400 pasajeros, un 80 por ciento norteamericanos, atendidos por 388 tripulantes, una proporción inédita en un crucero.
Y es que el Silver Shadow ha sido concebido como un gigantesco yate clasificado como un Six Star Rating, donde la esquisitez y la privacidad son sus señas de identidad. Así, de sus 194 cabinas que son auténticas suites, 157 poseen terraza privada y sus pasajeros disponen a bordo de elementos tan insólitos como una completa bodega especializada en una gran selección de vinos Moët & Chandon y un salón para fumadores de puros habanos, el refinadoThe Humidor, donde los mejores cigarros se exponen en una vitrina especial. Todo en un decorado neoclásico de elegante belleza, que exhibe hasta unos relieves de la Acrópolis.
En el restaurante a la carta Le Cordon Bleu, un anexo flotante del clásico establecimiento parisino de 1895, pueden degustarse sus mas célebres recetas gastronómicas en cubertería de plata y vajilla de porcelana.
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