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JOSEP M. AGUILÓ Serían las doce del mediodía cuando empezaron a oírse en las cercanías del Parc de la Mar cláxones y silbatos, y el tráfico quedó interrumpido. Descartada la posibilidad de que se tratase de un recibimiento triunfal al Real Mallorca tras el partido contra el Valencia, el cronista dedujo que debía tratarse de una manifestación. Una manifestación que, en general, contó con la simpatía y comprensión de los ciudadanos que en aquellos momentos se encontraban paseando o trabajando por el centro de Palma.

Por una vez, hecho insólito en los anales de esta ciudad, la mayor parte de la gente conocía la causa de la protesta. «Es por la subida del gasóleo. Por un lado me parece que su reivindicación es justa, está bien que protesten, si bien supone un inconveniente para el desplazamiento de los ciudadanos», comentó Celedonio Martínez; «necesitan el gasóleo para trabajar», añadió Damià. No todas las opiniones fueron positivas. Así, Bartolomé Castell señaló que «las manifestaciones siempre perjudican a los ciudadanos y no arreglan nada».

Al mediodía, los agricultores pararon sus tractores frente a la Delegación del Gobierno, en la calle Constitució, y ocuparon la parte derecha del paseo d'es Born, que quedó cortado al tráfico. Pasadas las doce, y mientras los agricultores hacían públicas sus reivindicaciones, los turistas que paseaban por es Born aprovechaban la ocasión para inmortalizar en sus cámaras las imágenes de unos tractores fuera de su hábitat natural.

Tras los discursos llegó el momento de reponer fuerzas, y nada mejor para ello que un buen trozo de coca de trempó y un vaso de vino tinto, suministrados por un camión que también participó en la manifestación. Catalina Cirer, delegada del Gobierno, también debió de pensar lo mismo, y aceptó la invitación para participar en el nutritivo tentempié. Alrededor de la una y media los agricultores volvían, seguramente con un poco más de esperanza que horas antes, a casa, a seguir cultivando esa tierra que nos permite vivir y sobrevivir a quienes sólo nos movemos en el asfalto.