Thomàs añadió que tras revisar este miércoles el expediente de
la empresa promotora de la obra, «comprobé que contaba con
licencias para cambiar la cubierta y sustituir los forjados del
edificio principal del inmueble, pero ni siquiera había solicitado
autorización para reformar el bloque que se vino abajo por exceso
de carga en sus muros, según los bomberos».
En opinión de Thomàs, tanto Vidal como el teniente de alcalde de
Turisme, Joan Bauzá, «no han dicho la verdad al asegurar que las
obras del hotel Tívoli contaban con las correspondientes licencias
del Consistorio. Han estado durante una semana diciendo que todo
estaba en regla, cuando han dicho la verdad a medias, cuando se
debería de haber abierto un expediente urbanístico al promotor de
la obra, Josep Forteza Rey. Se trata de un problema de
responsabilidad política, ya que no se puede encubrir la actuación
ilegal de un ciudadano, como si en este municipio hubiera
ciudadanos de primera y segunda».
Asimismo criticó los impedimentos del Ajuntament para que se
conozca el expediente urbanístico de este inmueble, «Vidal requirió
el consejo del secretario del Consistorio para ver si podía acceder
o no al expediente, circunstancia que sí pude hacer por ser
regidora del Ajuntament. Hasta hoy por la mañana (por ayer), que
fue cuando conocí el informe de los bomberos y pude darme cuenta de
lo que estaba pasando, no he reaccionado ante lo que estaba
pasando».
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