El conseller d'Hisenda y Pressuposts, Joan Mesquida, afirmó ayer en
la conferencia que impartió en el salón de actos del edificio
Guillem Cifre de Colonya de la UIB, que la «racanería del Gobierno
central fue la principal causa que motivó la creación del impuesto
turístico o ecotasa, para así disponer de fondos para la protección
del medio ambiente y rehabilitación de zonas turísticas». La
conferencia aglutinó a cerca de un centenar de estudiantes, los
cuales mostraron un gran interés por todos los pormenores del
impuesto turístico, «había muchas incógnitas por resolver, de ahí
que la presencia del conseller Mesquida ha sido muy clarificadora»,
indicaba el secretario general de Espai Jove, Florian Àlvarez.
La intervención del conseller duró unos 40 minutos, en los
cuales desgranó todos los pormenores de este proyecto calificado
como el «principal del Pacte de Progrés, porque la habitual
racanería del Gobierno y la falta de desarrollo del Régimen
Especial de Balears (REB) ha conducido a la aprobación de este
impuesto. El Ejecutivo de Aznar es el único gobierno que bloquea
sistemáticamente los impuestos medioambientales, a pesar de las
iniciativas que se aprueban en Europa».
Mesquida puntualizó que con la ecotasa el Govern «no pretende
desincentivar la demanda turística, sino cuidar el medioambiente.
Argumentar que por pagar dos euros al día va a provocar una bajada
del turismo, no es cierto. No comparto la opinión de que tengan que
venir menos turistas, tal y como han anunciado otros miembros del
Govern, pero sí creo en la necesidad de dosificar su afluecia a lo
largo del año». El coloquio, que duró cerca de una hora, puso de
manifiesto desde el primer momento la preocupación del mundo
universitario por cómo se van a gestionar los recursos de la
ecotasa y la merma de competitividad que el impuesto pueda provocar
ante la competencia de los países de la cuenca mediterránea
oriental.
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