J.M.18/05/01 0:00
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Un total de 180.036 vehículos pasaron la inspección técnica durante el pasado año, de los cuales 120.910 superaron la primera prueba y 43.040 tuvieron que pasar una segunda revisión. Por tipos de vehículos, según los datos de 2000, hasta 135.111 turismos tuvieron que superar el trámite de la ITV, y de éstos vehículos 33.133 fueron obligados a pasar una segunda revisión. Un total de 3.938 motocicletas, 30.066 vehículos ligeros y 10.835 pesados pasaron por las distintas instalaciones de la ITV que hay en Mallorca para ser revisados. Según los datos aportados por el Consell, apenas el 6'3 por ciento de las segundas revisiones no superaron las pruebas y, por lo tanto, no tienen permiso para seguir circulando. En cuanto a inspecciones no periódicas, una competencia del servicio de la ITV del Consell, se han realizado 17.647 revisiones.

Los fallos en el bastidor y en el motor siguen encabezando el ránking de las deficiencias que encuentran los técnicos en los vehículos que pasan la revisión de la ITV. De los 180.000 vehículos revisados, 40.838 presentaron problemas leves en los motores, lo que supone un 24'9 por ciento de los fallos detectados en la ITV. Además, 12.788 registraban fallos graves en los motores.

Los servicios de ITV encontraron averias leves en los ejes y las suspensiones de un total de 27.111 vehículos de la isla, un 16'5 por ciento, mientras 13.313 presentaban fallos graves. Un 10'3 por ciento de los vehículos revisados presentaron deficiencias en la dirección. Es decir, 16.943 vehículos tuvieron que solventar fallos leves en la dirección, y 4.362 presentaban deficiencias graves. De las 180.000 revisiones realizadas el pasado año, 15.604 detectaron problemas leves en los frenos, un 9'5 por ciento, y 13.912, fallos graves.

Problemas de alumbrado, señalización y carrocería son los problemas que, en menor medida, se detectan en las inspecciones de la ITV, que deben superar todos aquellos vehículos con más de cuatro años de antigüedad. El servicio incidirá a partir del año 2002 en la detección de fallos en la emisión de gases, tal y como marca la normativa nacional.