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El president del Govern, Francesc Antich, confirmó ayer que el Ejecutivo balear promulgará un decreto para ayudar a las personas jóvenes y de escasos recursos que dispongan de vivienda propia o alquilada. «Sabemos que el acceso a la vivienda es la gran preocupación de muchas familias en las Islas, y este Govern no permanecerá insensible a esa cuestión», dijo Antich tras inaugurar el XIII Congreso de la Federación Europea de Entidades de Ahorro y Crédito para la Vivienda que reúne en Palma a más de cien congresistas de 19 países.

Más de veinte mil familias buscan una vivienda en Balears, cuyos precios se han disparado en los últimos años, hasta el punto de que las Islas son la cuarta comunitat con los precios más caros, después del País Vasco, Madrid y Catalunya.

Los expertos expresaron su convencimiento de que los tipos de interés en las créditos hipotecarios «se mantendrán» en los parámetros actuales. Pese a la incertidumbre generada por los atentados terroristas en EE UU, los congresistas reiteraron que en el futuro inmediato no se vislumbran variaciones sustanciales en los márgenes financieros derivados de la adquisición de inmuebles.

La casa propia es un «seguro en la vejez»
Los representantes de bancos y cajas de ahorro de toda Europa abogaron por la adquisición de inmuebles como seguro en la vejez, sobre todo, por el problema demográfico común a todos los países europeos. Los expertos, reunidos por Sa Nostra bajo el lema «La financiación inmobiliaria rompe fronteras», coincidieron en señalar el acceso a la vivienda propia como «uno de los principales problemas en Europa». En el encuentro quedó de manifiesto España es uno de los países de la UE que posee el porcentaje más elevado de ciudadanos con vivienda propia, con un 85%, frente a una media del resto de Estados del 60%. El presidente de la Federación Europea de Entidades de Ahorro y Crédito para la Vivienda, Heinz Wilderer, dijo que un estudio ha demostrado que los propietarios de bienes inmuebles no solo disfrutan en su juventud de una mayor calidad de vivienda y de vida, sino que también en la vejez poseen un mayor margen financiero por no tener que hacer frente al pago de un alquiler. En esa cuestión también coincidió el presidente de Sa Nostra, Miquel Capellá, quien admitió que la vivienda «es la principal preocupación de muchos ciudadanos». «La vivienda se ha convertido en valor de cambio por lo que representa de seguridad en el futuro y por lo que representa, también, en la modalidad de inversión de futuro», precisó.