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AINA VIVES Palma cerrará el año 2002 con 375.000 habitantes, si las previsiones se mantienen como hasta ahora. El motivo es conocido por todos. La llegada de extranjeros extracomunitarios se mantiene en los mismos parámetros del año pasado. Así, en cinco años, Palma habrá pasado de 304.000 habitantes a 372.000 en el primer semestre de este año, para llegar a los 375.000 a finales de 2002. Un incremento de la población «poco racional» del 20 por ciento.

El responsable del área de Población del Ajuntament de Palma, Tomàs Lladó, equipara el aumento del número de residentes que ha experimentado Ciutat en los tres últimos años, desde el año 2000 hasta hoy día, a dos veces la población de Calvià. «Es como si en tres años, Palma hubiera crecido como dos veces la población de Calvià». Con esta comparativa, Lladó pretende dar una idea del desproporcionado crecimiento de Palma.

Lladó comenta que este crecimiento de habitantes ha provocado una eclosión urbanística en los barrios de Son Peretó, Son Anglada, o Son Xigala, entre otros. En este último barrio, además, ya se ha ejecutado la urbanización Son Xigala II, que ha provocado un aumento de la población de 125 habitantes en el primer semestre del presente año, y todavía queda por desarrollar la segunda fase, Son Xigala I.

Son Cladera es otro de los barrios de Palma donde es visible este crecimiento urbanístico. En el primer semestre de 2002, la población de Son Caldera ha aumentado en 185 personas y todavía se están construyendo nuevos bloques de edificios en Son Fuster.

En Montision, la densidad de población, de 132'89 habitantes por hectárea, no subirá dado que se están construyendo chalets y no bloques de pisos.