Sepa usted que si en el aeropuerto de Palma pierde algo, sea de
mucho o poco valor, puede encontrarlo, tras demostrar que es de su
propiedad, en una pequeña oficina de objetos hallados, sita a la
altura de las puertas B y C de llegadas, que para muchos -para
servidor- pasa desapecibida en la inmesidad de tan enorme hall.
Naturalmente, lo recuperará siempre y cuando quien lo haya
encontrado lo deposite en ella. Que no siempre pasa eso... aunque
sucede con más frecuencia de lo que nos imaginamos.
De ahí que muchos de los objetos perdidos no se reclamen, pues
quien los ha extraviado supone que quien los ha encontrado no los
devolverá; por otra parte, muchos ni saben que existe dicha
oficina, abierta al público cada día, de 8 a 14 horas, y que tiene
un teléfono, el 971 789456, donde se les atenderá dentro de ese
horario.
Acompañados por Àngel Huerta, funcionario del aeropuerto de Son
Sant Joan, visitamos dicha oficina donde, por orden expresa de la
dirección, no se pueden hacer fotos, pero sí ver lo que hay. ¿Y qué
vemos en ella? Ante todo, orden, lo que significa que cada cosa
está en su sitio debidamente clasificada y registrada, con su
correspondiente etiqueta que la identifica.
Allí vemos, sobre todo, bolsas de viaje, gafas, teléfonos
móviles, una bolsa para palos de golf, aunque vacía, aparatos de
radio de todo tipo, dos sillas de ruedas, un cochecito de niño,
según la encargada dejados a propósito... «A veces nos han traído
carteras con dinero, lo cual, que estuviera el dinero, ha extrañado
mucho al propietario cuando ha venido a recogerla», explica. El
procedimiento para dejar el objeto hallado en dicha dependencia es
simple. Se limita a que el funcionario entregará una copia del
depósito a la persona que lo ha llevado hasta allí.
P.P.
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