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El Consejo de Ministros tiene previsto en su reunión de hoy relevar a Catalina Cirer como delegada del Gobierno en Balears. La propia Catalina Cirer esperaba ayer que la decisión de su relevo se produzca en la reunión que celebrará hoy el Consejo de Ministros.

El Consejo de Ministros ya tenía previsto tratar en su reunión del pasado viernes el relevo de Cirer, pero el desplazamiento a Galicia de todo el Ejecutivo obligó a cambiar de planes y aplazar cualquier decisión sobre la Delegación del Gobierno de Balears. Aznar no quiso tratar en Galicia ningún asunto que no estuviese relacionado con esta comunidad autónoma. De hecho, el ministro del Interior, Àngel Acebes, pretendía aprovechar su visita a Palma del pasado martes para asistir a la toma de posesión del nuevo delegado del Gobierno. Finalmente, Acebes estuvo en Palma, pero sólo explicó los detalles de la «Operación Ulises».

Según las previsiones, el Consejo de Ministro decidirá formalmente esta mañana el cese de Catalina Cirer como delegada del Gobierno, aunque siempre pueden producirse cambios en el último momento. El relevo sería publicado en el Boletín Oficial del Estado de mañana y, en principio, el nuevo delegado del Gobierno debería desplazarse a Madrid el próximo lunes para tomar posesión del cargo.

Catalina Cirer fue nombrada delegada del Gobierno poco después de que el PP ganase las elecciones generales de 1996. En aquel momento, Cirer formaba parte del Govern de Soler, quien semanas después fue obligado a dimitir como presidente del Gabinete autonómico. A partir de ahora, Cirer dedicará todos sus esfuerzos a preparar las próximas elecciones municipales en Palma. Cirer fue nombrada candidata del PP en Palma en julio y pidió expresamente al ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, que la sustituyese en enero del cargo de delegada del Gobierno.

Por otro lado, el Consejo de Ministros aprobará un proyecto del Ministerio de Medio Ambiente, que dirige Jaume Matas, para construir cuatro desaladoras de agua de mar en Balears, por un valor total de 66 millones de euros. Así, el Gobierno dará «luz verde» a cuatro acuerdos diferentes que permitirán la contratación de las obras de las desaladoras, que estarán situadas en Andratx (Mallorca), Badia d'Alcúdia (Mallorca), Ciutadella (Menorca) y Santa Eulària (Eivissa), tal y como adelantó este periódico.