El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, criticó ayer
duramente en su visita al stand de Balears en fitur, con motivo de
la celebración del «Día de Balears», la política turística del
Govern, afirmando ante la prensa local y nacional que «los
resultados de 2002 son malos y entrar en discusión alguna es
absurdo. La realidad es que el sector turístico balear padece una
recesión y está herido por culpa de la política turística errática
y descoordinada del Govern, lo cual demuestra que la política
turística del Govern ha fracasado durante estos años».
Matas destacó el hecho de que Balears haya dejado de ser el
destino turístico líder y pérdido cuota de mercado en temporada
baja y media. «Exigir un cambio radical al actual ejecutivo
autonómico es imposible. Basta de imágenes negativas y lanzar
mensajes problemáticos que lo único que deterioran es la imagen de
las Islas. Tenemos a un Govern enfrentado con el sector turístico,
que ha propiciado que las Islas pierdan el liderazgo y todo ello
por intereses partidistas y electoralistas. Hay que recuperar el
diálogo y lanzar mensajes positivos».
Preguntado sobre la temporada 2003, afirmó: «La situación es
calamitosa y grave y ante esto hay que exigir actuaciones porque a
nadie le van a solucionar los problemas. Se necesita un
replanteamiento urgente y no podemos abandonar al sector
turístico».
El presidente del Govern, Francesc Antich, en un tono
conciliador y nada polémico, pidió unidad en el sector: «A ver si
somos capaces de unir esfuerzos para recuperar la imagen de Balears
en el extranjero». Aprovechó los actos organizados con motivo del
«Día de Balears» para anunciar la estrategia promocional turística
del Govern, que invertirá este año 15 millones de euros con ayuda
de Turespaña, y dejar claro que «Balears sigue siendo un destino
líder en pernoctaciones turísticas, ocupación y en otros aspectos,
como el ser un destino puntero en preservación del paisaje y
medioambiente por convicción y necesidad. En 2002, se consolidó la
demanda en las Islas, de ahí que queremos impulsar la
promoción».
Antich no quiso valorar las declaraciones de José María Aznar en
contra del Govern, consideró que «Fitur es para hablar de turismo,
ya que hay otros foros para debatir otros temas, pese a que a
algunos les encanta aprovechar este evento para lanzar críticas».
Sí analizó la situación internacional y el conflicto de Irak.
«Somos muchos los que pensamos que la situación de una posible
guerra se puede evitar. El efecto negativo de un conflicto bélico
se centrará a nivel económico y social, afectando claro está al
turismo». En este sentido, el conseller de Turisme, Celestí Alomar,
apuntó que si hay un conflicto, «se hará un esfuerzo promocional
para paliar el efecto de una guerra». Alomar dió a conocer los
acuerdos y negociaciones con Viva Tours, Viajes el Corte Inglés,
Mundi Color, Globalia y Marsans para captar el turismo español. «El
mercado alemán no va a salvar la próxima temporada y el británico
se mantendrá. Hay que buscar mercados alternativos».
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