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Los pasajeros de un avión de Iberia con destino a Barcelona protagonizaron ayer un motín en las instalaciones de Son Sant Joan que obligó a intervenir incluso a la Guardia Civil del aeropuerto. La razón de esta movilización fue el retraso del vuelo IB 1713, que debía salir a las 11.25 de la mañana de Son Sant Joan, pero que finalmente no pudo hacerlo hasta las 16.15 horas. El motín comenzó cuando los pasajeros trataron de impedir el embarque del pasaje de otro avión con destino a Barcelona, lo que obligó a la compañía a requerir la presencia de la Guardia Civil, que se personó en la zona de embarque. Ni siquiera la presencia de los miembros de la Benemérita hizo desistir a los pasajeros, que no dejaron embarcar hasta que Iberia les comunicó por fin la salida de su avión.

Una de los pasajeros del vuelo, Pilar, explicó que la compañía aérea alegó problemas técnicos en el tren de aterrizaje como causa de retraso. Sin embargo, entre el pasaje comenzó el nerviosismo cuando comprobaron que otro avión de Iberia con destino también a Barcelona salió poco tiempo después con la mitad del pasaje vacío. Los pasajeros se indignaron por el hecho de que Iberia no tratara de recolocar a parte del pasaje en este avión. La indignación aumentó ante la falta de información del personal de Iberia, por lo que los pasajeros trataron de ponerse en contacto con el servicio de chaquetas rojas del aeropuerto sin conseguirlo. A raíz de esta imposibilidad, surgió la idea de impedir el embarque del otro avión.

Además de este incidente, la Policía Nacional tuvo que sacar a seis jóvenes de otro vuelo, cuando ya estaban embarcados, porque comenzaron a increpar a la tripulación por culpa de otro retraso en la salida. El comandante avisó a la Policía Nacional, que identificó a los jóvenes y les dejó de nuevo embarcar sin mayores problemas. Al margen de estos incidentes, la jornada de ayer transcurrió sin problemas destacables, con retrasos que, salvo contadas excepciones, entran dentro de lo habitual. Como todos los sábados, el personal de tierra acudió con mascarillas para prevenir la neumonía asiática al avión de la compañía Sky Service que realiza un vuelo entre Toronto, Belfast y Palma.