El director general de Caza, Protección de Especies y Educación
Ambiental, Antoni Gómez, soltó ayer por la tarde en el parque
natural de Mondragó (Santanyí), doce tortugas de tierra
mediterráneas, especie testudo hermanni. Seis machos y seis
hembras. La acción tenía una función didáctica, de hecho era un
llamamiento a la concienciación ciudadana, advirtiendo de que
«estos animales no son domésticos, sino salvajes, y está prohibido
tenerlos en cautividad». Gómez estuvo acompañado por la directora
del parque Àngels Ramos, agentes medioambientales y forestales.
Estas tortugas criadas en cautividad, fueron donación de
particulares a los centros de recuperación de Fauna de la Fundació
Natura Parc y de Son Reus. El programa tiene como objetivo reforzar
el repoblamiento de esta especie, que en determinados sitios de la
Isla, como la comarca del Pla, ha disminuido de forma espectacular
a raíz del avance de la urbanización y cierre de fincas.
Según informaron, en los últimos veinte años se han soltado más
de 1.300 tortugas, muchas de ellas en Mondragó y en el parque de
Llevant, donde precisamente la semana pasada se liberaron cerca de
setenta. En Mallorca hay unos siete criadores legalizados. Además
de la mediterránea, en Andratx y Calvià se encuentra «sa Mora»,
graeca. Por Internet, una pareja puede tener un precio superior de
400 euros. Asimismo, detalló que cada tortuga está marcada y se
realizan seguimientos. Estos animales pueden llegar a sobrepasar
los cien años de vida. A la vez se informó de que las tortugas
fueron introducidas en la Isla, a diferencia de especies autóctonas
como eferreret y las rates pinyades. También pueden ser
alimentación.
Tomeu Obrador
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